El Balcón de las Artes que piensa en Cuba

El Balcón de las Artes en Camagüey no es como otro de los tantos que pululan en toda esta legendaria Isla.

Se me antoja escribirle unas letras y no porque sea un súper balcón, bello, extravagante, pomposo…. No. Es que su forma amplia y vistosa no solo lo distingue de sus similares, sino que en este se dan las manos arte y recreación. Fórmula que no siempre encuentra el angular para que confluya la máxima cultural: disfrutar a la vez que enriquecer el espíritu, el alma, el conocimiento.

Resulta que este balcón tiene el don de agitar a artistas y públicos asiduos a la Casa del Joven Creador (CJC) agramontina -única de su tipo de referencia en Cuba-, porque tal cual su nombre lo indica: Balcón de las Artes, ha multiplicado su espacio preconcebido; su programación, por otros tantos… al ofrecer una amplia y diversa propuesta cultural durante los meses de verano.

Y es que este balcón se alza como el más visitado en todo Camagüey. Desde que inició la jornada estival aquí,los multicolores trajes, la música cubana, los bailes… se han adueñado del ambiente de este mirador, tan peculiar.

En él concurren además de su propuesta habitual y todas las noches de viernes, sábados y domingos la proyección de la Muestra 30 Aniversario, la cual es una muy inteligente y acertada recopilación de los mejores materiales presentados en las muestras de audiovisual del Almacén de la Imagen, y proyectos alternativos para las diferentes tendencias culturales, en los que sin duda, el público juvenil es el más beneficiado.

Desde que en la víspera del pasado 2 de julio -inicio del verano en Cuba- el Balcón más juvenil, artístico y talentoso de este Camagüey legendario abrazó el arte emanado del talento joven, seguidores de toda esta extensa llanura se dan cita en él, para consumir cultura de la buena, de esa que no está enlatada, sino sellada por la creación auténtica e inspiradora.

No es casual entonces que el proyecto sociocultural Golpe a Golpe, volviera a brillar, justamente cuando está cumpliendo su décimo aniversario.

A través de los artistas «golpeadores», multiplicados en proyectos como Cine en los Barrios y Brigada de Jóvenes Creadores, se disfrutó de las raíces más autóctonas, del son, del bolero, de la trova, de bailes tradicionales y folclóricos, y de otras propuestas como el rap cubano y de improvisaciones al estilo de las controversias campesinas.

Y es que Golpe a Golpe no queda atrás, porque durante los meses de verano llegará a más de 50 comunidades para ofrecer sus espectáculos de variedades. O sea el «paquete cultural» cubano-camagüeyano.

Desde este balcón, lugar por donde inició el verano cultural en Camagüey; el cual lidera la Asociación Hermanos Saíz (AHS), se irradió con acciones más que con palabras la necesidad de transformar la comunidad desde la cultura; con el accionar de la joven vanguardia artística, agrupada en la AHS.

El nuevo contexto que vive el país impone pensar cuántos balcones del arte más se pueden diseminar por toda esta geografía, porque en escenarios y ambientes como este, es donde comienzan a formarse y cultivarse los valores y códigos socio-culturales que sustentan las aptitudes y consumos; también cultural, de hombres y mujeres, que tanto demanda la sociedad cubana actual.

El Balcón de las Artes en Camagüey reveló que el trabajo que realiza la AHS; el de promover y proteger lo más valioso del arte hecho por los noveles talentos, es más que valioso; imprescindible, porque el quehacer comunitario que se desarrolla y expande a través de múltiples proyectos juveniles en Cuba, incluso en puntos geográficos bien intrincados, es la manera de luchar como David, ahora contra un Goliat seudocultural.