Abrimos Paréntesis para realizar un primer acercamiento a la organización que agrupa la joven vanguardia artística cubana, la Asociación Hermanos Saíz en el año de su aniversario 30.
Surgida a mediados de la década de los 80 del pasado siglo, en el Primer Encuentro de Escritores, Artistas y Técnicos de la Cultura, que se desarrolló entre el 16 y 18 de octubre de 1986, la Asociación Hermanos Saíz debe su constitución a un grupo de jóvenes e intelectuales que por aquel entonces integraban las brigadas Hermanos Saíz, Raúl Gómez García y El Movimiento de la Nueva Trova.
Con filiales en todas las provincias del país y algunos municipios la Asociación Hermanos Saíz (AHS) agrupa a más de tres mil jóvenes intelectuales y escritores cubanos, que son reconocidos como la vanguardia del arte joven cubano. Hoy dialogaré con dos creadores que forman parte de su Dirección Nacional sobre el funcionamiento de la organización y los preparativos para celebrar sus tres primeras décadas de existencia. El primero de ellos, ya ha venido a Paréntesis en otras oportunidades, se trata del escritor y teatrista Rafael González Muñoz, vicepresidente nacional.
La AHS cumple 30 años de creada, ¿cuál fue el motivo de su surgimiento?
Como tú bien decías, existían estas tres organizaciones que creo yo —pues nací un año después en 1987— el objetivo fundamental era integrar esos tres movimientos: El Movimiento de la Nueva Trova, con una solidez indiscutible; la Brigada Hermanos Saíz, donde estaban intelectuales, artistas; escritores muy reconocidos, con una obra emergente pero ya se venía cristalizando, y la Raúl Gómez García donde habían promotores de la cultura, instructores. Creo que ese fue el principal objetivo: integrar, pluralizar, crear ese espíritu asociativo de las tres organizaciones y erigir un proyecto que redundaría en lo que es hoy la Asociación Hermanos Saíz…
Pero existen varias instituciones y organización que agrupan a escritores y artistas… ¿qué singulariza a la Asociación Hermanos Saíz y qué importancia le das tú a la labor recorrida en estos treinta años?
Es verdad que existen varias, pero la Asociación Hermanos Saíz —que sigue siendo selectiva y voluntaria, a la vez— agrupa a intelectuales y artistas que nosotros creemos son la vanguardia artística y que por ellos apostamos. Es una organización que reúne a todas las manifestaciones artísticas; además tenemos a críticos, investigadores, historiadores y promotores culturales; o sea, creo que es una de las pocas organizaciones que agrupa a todos estos jóvenes intelectuales, artistas; para de forma asociativa, de forma conjunta, desarrollar procesos culturales y contribuir a la política cultural que es defender los valores con los que nacimos y con los que venimos desarrollándonos.
Decías que la AHS es una organización selectiva, ¿cómo acceder entonces?, ¿qué requisitos deben tener los jóvenes que quieran pertenecer a ella?
Primero, estar comprometidos con un arte genuino, con un arte que su creador cree, piense y se proponga ser un arte de vanguardia. Tener más de dieciséis años y menos de treintaicinco; acercarse a la filial de la organización que exista en la provincia —en cada provincia existe una, incluso hay provincias que cuentan con células en algunos municipios—; presentar un curriculum, una carta donde el interesado manifieste que está de acuerdo con los estatutos de la organización y llevar una muestra de la obra, que un jurado —conformado por artistas de reconocido prestigio— evaluará.
¿Cuándo se realizan los crecimientos?
Siempre hay dos crecimientos anuales —esporádicamente, cuando por ejemplo viene un consejo nacional ampliado o algún congreso, se hace uno, pero siempre hay dos—: uno en abril y otro en octubre; el primero los resultados se dan el 4 de abril, en saludo a esa fecha memorable para la Juventud y los pioneros cubanos y el segundo, el 18 de octubre, que es el aniversario de nuestra organización.
Un joven que no haya accedido al crecimiento, pero que tenga inquietudes artísticas, ¿le ofrece la AHS participación en sus proyectos…?
Por supuesto, puede ser incluso, un joven que se haya presentado y no haya sido aceptado esa primera vez, pues estamos hablando de jóvenes que tienen una obra emergente, que mucha veces no poseen todas las aptitudes para ingresar a esta organización de creadores, la Asociación le da los espacios y los acompaña en el crecimiento de esa obra; incluso puede que sea un excelente artista aficionado y que todavía no tenga una obra sólida, no haya sedimentado los conocimientos para entrar a la organización, pero no significa que no lo acompañemos, lo promovamos, le produzcamos alguna actividad, alguna acción artística, que el ejecutivo de la filial provincial considere que vale la pena apoyarlo. Básicamente es así, todo joven que se acerque a la Asociación, que la Asociación descubra en él potencialidades artísticas, tiene el deber de promocionarlo.
Estuviste al frente de la Asociación Hermanos Saíz en su filial cienfueguera ¿cómo se desempeña el trabajo de promoción a la joven vanguardia artística en un territorio?
No dista tanto de la Dirección Nacional, aunque trabajar para mí en Cienfuegos fue muy importante y promover el arte desde una provincia es tratar de socializar tu trabajo con las instituciones desde ese territorio; es decir, crear una articulación entre la dirección de cultura provincial, los centros y consejos provinciales… si algo bueno dejó la plataforma del Segundo Congreso de la Asociación Hermanos Saíz y el último Consejo Nacional fue ese diálogo entre la AHS y las instituciones de la cultura.
¿De qué modo la AHS promueve a los jóvenes artistas que componen su membrecía?, ¿cómo funciona este proceso?
Identificando de quién estamos hablando, quiénes son esos artistas que nosotros consideramos son la vanguardia; visibilizando cuál es su obra; tratando de entenderla para promocionarla a través de todo un sistema de programas que tenemos, como el propio Paréntesis —programa líder de la promoción—, entre otros espacios; uno muy importante, junto a este, es Tiempo Joven, que sale habitualmente los sábados en el periódico Juventud Rebelde, que encabeza el periodista José Luis Estrada. Es un espacio que nos hace esas historias de vida de nuestros asociados, sábado tras sábado, en una página completa. También contamos con espacios radiales, que se multiplican en todo el territorio nacional; ya estamos pensando tener nuestro anhelado espacio nacional de la radio. En otros espacios televisivos, a través de los telecentros provinciales, con vías alternativas como los flashs, carteles… La Asociación Hermanos Saíz ha tratado de mantener una línea cartelística importante y a todas, o casi todas, nuestras jornadas de programación tratamos de que tengan su cartel, su spot, de ponerlo en la TV… esas son algunas de las vías con las que contamos para visibilizar a nuestros asociados.
Una vez terminada la vida como asociado, el joven cumple treinta seis años ¿es una garantía haber pertenecido a la AHS para después pertenecer a la UNEAC?
No precisamente, entrar a la Asociación Hermanos Saíz con dieciséis años o un poco más, no quiere decir que luego va a ser un trampolín para acceder a la UNEAC porque la obra artística, se supone, que vaya creciendo y que en algún momento tengas un curriculum sólido para presentarte al crecimiento de la UNEAC, pero eso no es directamente proporcional a un cupo, si la obra que me permitió entrar a la AHS no se siguió desarrollando, no hay motivos para acceder a la UNEAC, pues ésta reúne a escritores y artistas con una sólida carrera, sedimentada, una carrera reconocida. Si bien la Asociación Hermanos Saíz debe llevarte a eso, a potenciar tu carrera, es un proceso también muy personal del artista desarrollarse o no.
Hablando de la UNEAC, ¿cómo se materializa la relación de la Asociación Hermanos Saíz y del sistema institucional y también con la UNEAC en nuestro país?
Te mencionaba antes al Segundo Congreso de la Asociación Hermanos Saíz y al octavo de la UNEAC demostraron que si trabajamos todos juntos vamos a contribuir desde el arte y la cultura con un mejor país y eso es lo que intentamos hacer.
Sé que atiendes la promoción de la organización y la de los proyectos más importantes de sus miembros, ¿de qué manera, en el área de la comunicación, es visible esta relación?
La Asociación Hermanos Saíz a nivel nacional cuenta con un Departamento de Comunicación, donde —desde la vicepresidencia que yo atiendo— el trabajo fundamental es promover el arte joven cubano a escala nacional; la tarea de ese departamento es visibilizar tanto al creador que convive con nosotros aquí en La Habana, como al creador que está en Baracoa o en cualquiera de las filiales provinciales. Tenemos espacios como Itinerario, que sale los domingos en el Noticiero Dominical, estamos pensando en otro, Perspectivas, que saldrá en la revista Buenos Días y otros espacios y vías que sigan aportando en nuestra intención de seguir promocionando al arte joven cubano.
Me acompaña ahora el joven diseñador Rubiel García González, Presidente Nacional de la Asociación Hermanos Saíz, bienvenido a casa una vez más… tengo entendido que en presencia de Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, en el Consejo Ampliado, en diciembre del 2015, se inauguró oficialmente el plan de actividades por el aniversario 30 de la AHS, ¿qué actividades principales se han desarrollado hasta el momento?
Desde el pasado diciembre, cuando cerramos el año, que fue un año de balance, de debates sobre en qué se había avanzado y en qué no y cuáles eran las líneas que íbamos a trabajar durante estos dos años, entre congreso y congreso, con respecto a la labor de la Asociación Hermanos Saíz y los acuerdos que se habían tomado en el pasado Segundo Congreso, decidimos dedicar el año 2016 íntegro a esta celebración y comenzamos precisamente con los festivales y jornadas de programación que se realizaron en el primer semestre: el Longina, el Caturla, que son de Villa Clara. Este año también está signado por los diez años de Paréntesis, un programa que para nosotros es importantísimo, porque por aquí han transitado buena parte de los que hoy ya no son miembros de la Asociación Hermanos Saíz, pero tienen una obra y un trabajo significativo, y en muchas ocasiones su primera presentación en la TV fue en este espacio. De los eventos en lo que más puntualmente nos estamos concentrando son el Festival Piña Colada, en Ciego de Ávila; las Romerías de Mayo —Festival de festivales— en Holguín, dedicado puntualmente a los 30 años y a los 90 de Fidel, celebración que va estar acompañando también todos nuestros eventos, pues Fidel ha tenido una participación fundamental —no solo en el acompañamiento con las ideas, con la política cultural que hoy implementa el país, sino también en el acompañamiento intelectual—; esa cercanía que siempre ha tenido con la organización nuestro máximo líder. Los cincuenta y cinco de la UNEAC van a ser parte también durante esta celebración, igualmente, los cincuenta y cinco de Palabras a los intelectuales. En los meses de julio y agosto estará Arte en la Rampa en el Pabellón Cuba, también con los Encuentros con…, con los espacios de debates, presentaciones artísticas, en estos mismos meses se van a mantener las cruzadas artísticas literarias en las provincias, ya habituales, de Cienfuegos y Camagüey, y el esperado ascenso al Turquino con un grupo de creadores, que este año serán 30, haciendo alusión al aniversario; allí celebraremos también el cumpleaños de Fidel al lado de Martí, como todos los años lo hacemos. Por eso dedicamos el 2015 a debatir aspectos internos de la organización y el 2016 a celebrarlo con todos nuestros creadores.
¿Cuál consideras ha sido el mayor aporte hecho por la Asociación Hermanos Saíz a la cultura cubana en estas tres décadas de existencia?
Yo diría que primero darle voz y voto a un grupo de jóvenes creadores que componen el mapa artístico literario cubano en la participación en la política cultural cubana y su implementación, y esa es una fortalece que tiene hoy la Asociación, que exista un complemento del trabajo del artista audiovisual con el que hacen los de la plástica, con la promoción —que es transversal—; todo esto dotó de herramientas a los jóvenes que participan plenamente de la vida cultural cubana.
Hablabas de fortalezas y siempre que hay un aniversario uno hace un recuento de lo que ha hecho y de lo que falta por hacer, ¿en tu opinión cuáles son los mayores retos que tiene que enfrentar la Asociación Hermanos Saíz en estos momentos?
Primero que todo, continuar participando como lo hemos hecho hasta ahora, repensándola constantemente, mantenernos joven y parecernos a los jóvenes que la integran, sin olvidar el origen que tuvimos: de dónde venimos para tener bien claro a dónde vamos. No olvidar el pasado es un reto que tiene la Asociación para mantenerse, incluso, fresca. Los retos, para uno hoy, pueden ser vistos como una oportunidad cuando en otros momentos se vieron como amenazas. Eso nos mantiene el rumbo claro dentro del sentido que tiene la organización para estos jóvenes creadores.
¿Cómo imaginas o sueñas la AHS del futuro?
Tengo que imaginarla siempre beligerante, como contrapartida de estas instituciones, para hacerla funcionar mejor, que sean más útiles. Que siga manteniendo una relación con los jóvenes creadores y a la par facilitando un diálogo con otras generaciones, que es parte indispensable del enriquecimiento espiritual de los que pasan por ella y para los que nosotros constituimos un referente. Siempre he dicho que somos irreverentes, pero respetuosos y tiene que ver esa beligerancia con la alta responsabilidad con que se tocan los temas. Siempre responsables a la hora de tratar cualquier tema, siempre para mejorar la utilidad de la Asociación Hermanos Saíz y seguir siendo vanguardia de los jóvenes artistas cubanos.
Conducción: Maurín Delgado
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