A Diona la conocemos casi todos sus contemporáneos. Su nombre siempre resonaba en boca de los profesores de la carrera de Periodismo de la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas, por su dedicación a la carrera, sus altas notas y la capacidad para sobresalir en los debates con argumentos enjundiosos. En tercer año decidió partir hacia La Habana en busca, quizá, de nuevos horizontes.
Prácticamente acaba de graduarse y ya obtiene uno de los reconocimientos más importantes que un joven escritor, poeta, e investigador pretende, incluso más allá de las fronteras de esta provincia. Se trata del premio Sed de Belleza 2015, entregado por la Casa Editora de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en Villa Clara, el cual le posibilita publicar ahora el volumen Documental en período de crisis, fruto de su tesis de Licenciatura en Periodismo.
El libro consta de 15 entrevistas a destacados documentalistas sobre la producción del período especial, fundamentalmente. En sus páginas se escuchan las voces y criterios de Enrique Colina, Niurka Pérez, Belkis Vega, Ismael Perdomo, Fernando Pérez, Juan Carlos Cremata, Gustavo Pérez, Daniel Diez, Liset Vila, entre otros.
«Nunca pensé que ocurriera tan rápido, ni pensé en un premio. Lo considero un libro incluso, incompleto, porque existen otros documentalistas de esa época igual de importantes que se pueden entrevistar. El interés de la tesis era ver cómo se produjo el documental en el Período Especial. Los realizadores en esta época pasaron mucho trabajo para producir y su propuesta resulta un retrato de este período, aunque no se abordan específicamente las dificultades del cubano. Con el libro tratamos de darle un espacio al documental, que en los últimos tiempos no ha sido suficientemente tratado».
Diona Espinosa Naranjo, con solo 23 años, entregó su proyecto casi de manera casual, aunque vio en la convocatoria al premio Sed de Belleza —en esta ocasión dedicado al periodismo— la oportunidad de hacer cursar el libro.
«No creo que el premio radique en la autora. Considero que en las entrevistas, el mérito lo tiene el entrevistado. El periodista es solo un mediador de la información. Lo más importante del libro son los testimonios.
«Los jóvenes periodistas tienen propuestas interesantes, no soy la única. Hay tesis que tienen historias que contar, con temáticas diversas y trascendentales en Cuba. Muchas veces se quedan solo en trabajos de diploma o no son mirados por las editoriales, precisamente por ser tan jóvenes o porque los libros de periodismo no sean de tanto interés público. A veces también nos falta el conocimiento de cómo llegar a una casa editora. El periodismo cubano precisa de investigaciones profundas».
Actualmente, Diona trabaja en la Oficina Santiago Álvarez, en La Habana, y pretende realizar investigaciones mayores relacionadas con el género.
«Da mucho para investigar. Quizá en algún momento pueda realizar alguna incursión en el documental», afirma.
Durante la premiación en la Sala Marta Abreu del teatro La Caridad se presentó el texto Gaviotas en las aceras, de Daniel Zayas, ganador en literatura infantil el pasado año.
Por Laura Rodríguez Fuentes (Tomado de: Vanguardia)
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