Un pedacito de Sol Naciente

Camagüey entró por estos días en la época de los cerezos. En Japón, el hanami es el período para salir a los parques y observar la perfección de la naturaleza en flor. Hanami, en Camagüey, es el evento que permite apreciar y promover los valores de la cultura nipona sin perder la identidad nacional. Este evento se realiza todos los años, desde hace ya cinco, para promover la cultura japonesa. Del 13 al 17 de abril, se realizaron en diferentes espacios de la ciudad conferencias, talleres, exhibiciones.

El Portal del Arte Joven Cubano conversó con Juan Carlos Gil, artista camagüeyano miembro de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), organizador de este evento y uno de los principales entusiastas de las tradiciones japonesas en la Isla.

Época de los cerezos

Juan Carlos, ¿cómo surge Hanami?

Hanami es un evento que se crea hace cinco años con el objetivo de aunar proyectos que promuevan la cultura japonesa usando como medio la animación, proyectos similares al Manga Q´ba que tenemos acá en Camagüey.

Siempre hemos tenido claro que promover la cultura japonesa no significa copiarla, imitarla, sino tomar sus patrones estéticos, éticos, morales, artísticos, y asociarlos a nuestro contexto sin perder nuestra identidad. Ese es el principal objetivo.

Manga Q´ba somos un grupo de amigos que tuvimos deseos de buscar y conocer otras personas que también les gustara ese tipo de animación. Resultó que existía muchísima gente con los mismos intereses y el grupo fue creciendo. Pasamos de la animación a objetivos más amplios, como la promoción de manera general de la cultura japonesa y los valores que trae consigo.

Hanami persigue el mismo propósito, solo que abarca todo el país. La convocatoria la hacemos apoyándonos en las redes sociales, que han probado ser muy útiles y efectivas para ello, a partir de su propia dinámica de interrelación. A lo largo de toda Cuba existen muchos proyectos similares al nuestro, a estos se les manda la convocatoria, algunos integran la AHS y otros no, pero todos asisten a Hanami.

La quinta cosecha.

¿Qué actividades se realizaronn en esta edición?

Esta edición comenzó el miércoles 13 e implicó a diferentes instituciones culturales de la provincia: la sede de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), la Oficina del Historiador de Camagüey, la Casa de la Diversidad Cultural. Hubo una conferencia de la escritora Mariela Pérez-Castro acerca de la influencia de la poesía japonesa en Cuba, una exposición en la Casa de la Diversidad Cultural de objetos fabricados en Cuba, sobre todo en Camagüey: espadas, vestuario, todo.

El sábado se realizó en el club universitario El Bosque, una especie de  fiesta de disfraces donde las personas se visten como personajes de series animadas japonesas. El domingo culminó Hanami en el llamado Parque Japonés de esta ciudad, con una comida típica japonesa, exhibiciones de artes marciales, y además los participantes tendrán la posibilidad de contar las vivencias de este tipo que suceden en sus diferentes provincias. Tenemos asistentes de cinco provincias: La Habana, Santa Clara, Ciego de Ávila, Las Tunas, Sancti Spíritus y además, claro, Camagüey.  Ellos colaboran con material humano y experiencias que enriquecen el evento.

Más allá de abril

Juan Carlos, ¿cuentan con espacios para promover las cultura japonesa una vez que culmina Hanami?

El proyecto Manga Q´ba tiene un espacio fijo en la AHS todos los martes a las 8 y 30 p. m. Se proyectan audiovisuales y luego debates con los jóvenes que asisten. Viene un público muy variado, muchachos desde los 15 años hasta personas de 40. Hace poco comenzamos otra peña en la Terraza Arte Joven de la Asociación, esta es parecida, pero tiene otra línea estética, otra finalidad, va más a la creación.

Como asociados participamos con nuestro proyecto en diversos eventos: la Feria del Libro, las Fiestas del Tinajón, igual representamos a Camagüey en todas las citas equivalentes a Hanami que se desarrollan en las diferentes provincias del país, y no nos perdemos el festival nacional Otaku que se hace en La Habana. Dos años atrás, la Embajada Japonesa en Cuba nos hizo una invitación oficial para participar en las actividades que se realizaron a propósito de los 400 años de amistad Cuba-Japón.

Juan Carlos Gilconfiesa que se enamoró de la Tierra del Sol Naciente desde la literatura y el cine. Luego se encantó con la disciplina, la organización, el espíritu atento de ese país del Oriente. Estos, son los valores que busca promover en Cuba y en función de ello enfoca el trabajo de sus proyectos desde hace cuatro años, cuando ingresó a la AHS. También escribe guiones para historietas en conjunto con el Centro Provincial de Artes Plásticas de Camagüey. «En la Asociación se entra por una sección, con un trabajo determinado y una vez aquí dentro los intereses se diversifican, se expanden. Ahora me inclino hacia la realización audiovisual» —asegura Juan Carlos Gil.

Foto de portada: De la autora

 

 

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