¡Ya estamos en el Cuarto Congreso!
Hora lÃmite: las flechas comenzaron su trayectoria hace meses atrás cuando los miembros de la Dirección Nacional intercambiaron con artistas de Oriente, Centro y Occidente.
Hora cero: las reuniones de células y secciones. Ese fue el punto de partida y, desde entonces, los debates no han cesado: apostando por la Asociación que queremos; un arte joven parecido a su gente y su tiempo, cuyos ejes fundamentales son el centro de la diana.
Se ajustaron los recorridos, cronogramas. Los micrófonos se abrieron. Agendas escritas con marcas, tachaduras, borrones, noticas de OK, palomitas, listas de tareas pendientes. Fuertes lluvias intentaron detenernos en Las Tunas. El empuje de los jóvenes artistas se imponÃa. De algún modo siempre lo hicieron. Han sido meses y semanas de trabajo agotador: pero hemos llegado.
Los arqueros que apuntaron en cada una de las asambleas provinciales fueron claros en ideas y presupuestos: fomentar valores éticos y estéticos; amor por la cultura cubana; crear en Cuba y vincularse con la formación pedagógica, porque ahà están las canteras; prestigiar desde cualquier trinchera a la Revolución.
Se abogó por mantener y enriquecer becas, eventos y jornadas de programación, de unirse para que esta casa, que es la Asociación Hermanos SaÃz, siga siendo el espacio propicio para que los jóvenes hallen sus motivaciones mejores para la creación.
Ese es el reto. Los jóvenes nunca fallaron. Listos para dar criterios, defender su voluntad de cambio y acción: expresar cómo ellos ven y quieren hacer arte nuevo. Ansiosos piden la palabra. Se les ve defender con buenos argumentos sus verdades. De la mano de la Unión de Jóvenes Comunistas, el Gobierno y el Partido en cada territorio.
Fue creciendo, de asamblea en asamblea, el reto mismo. Repletando cada sede y cada actividad nocturna, después de los debates diarios. De las comisiones e informes de secciones y filiales. Ahora estaremos en La Habana y abrazaremos la convicción de que hemos crecido entre todos. Vamos a elegir a la próxima Dirección Nacional, que regirá a la Asociación en los años siguientes.
Herederos de los padres que hoy nombramos Miembros de Honor o Maestros de Juventudes, nos haremos acompañar de los artistas de todas las épocas. Será este un Congreso que marque cierta mayorÃa de edad. Hemos aprendido, escuchado, compartido, ampliado nuestras estrategias, expandido el horizonte de lo que llamamos arte de vanguardia.
Lo sabremos representar: ¡ya estamos en el Cuarto Congreso! Estas flechas nos han llegado como ideas de nuevos tiempos, para hacer la Asociación que necesita Cuba ahora: una organización que aboga por un arte comprometido, contra el bloqueo estadounidense hacia este pueblo culto y libre, contra todos los censores del amor y la verdad.
Hora de hoy: hagamos del Congreso un arte de amistad, de solidaridad y amor.
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social.