Desde 1995 la Asociación Hermanos Saiz (AHS) entrega premios y becas para reconocer a los más destacados exponentes del arte joven cubano en diversas manifestaciones del arte. Se compite en todas las zonas de la creación artística y en la medida que ha pasado el tiempo se han incorporado algunos premios como el de guion de documental.
Su sede nacional del Pabellón Cuba, contó esta vez con la presencia de los jóvenes intelectuales y artistas galardonados y de los miembros de los jurados que prestigiaron esta entrega, además de importantes figuras de la intelectualidad y el arte cubanos que recibieron por su trabajo y cercanía a la organización, el sello por los 35 años de la AHS.
El Premio Adolfo Llauradó, dirigido a reconocer la actuación entre los más bisoños, se otorga desde varios años atrás, pero este tuvo condiciones especiales según reza en el acta:
“En la presente edición del Premio Adolfo Llauradó el jurado conformado por la crítica e investigadora teatral Vivian Martínez Tabares, el dramaturgo Roberto Viña y la crítica de televisión Paquita de Armas; se reúne para analizar solo la categoría de actuación en televisión, debido a las afectaciones que provocó la pandemia en cuanto a la realización de espectáculos teatrales y de materiales cinematográficos. La Dirección Nacional de la AHS, de conjunto con el jurado, acordó analizar las propuestas teatrales que se filmaron y los estrenos teatrales ocurridos a final del año para la próxima edición. Asimismo, se incluirán en la próxima deliberación del jurado los estrenos que ocurrieron en cine en el 2021”.
En actuación masculina hubo un empate en el premio. Resultaron ganadores Rolando Chiong Estévez, por su desempeño en el Capítulo 10 Decisión de la teleserie Rompiendo el silencio y la telenovela cubana Vuelve a mirar, y Ángel Ramón Ruz Pérez, por su rol protagónico en el capítulo 9 Yakie Chang, en Promesas.
Consta que: “Ambos actores demostraron en sus roles, versatilidad y entrega, al enfrentar personajes nada fáciles que resultaron creíbles para los televidentes”.
También en actuación masculina, hubo mención para David Pereira Peña, por la telenovela Vuelve a mirar, y el telefilme Delantero, proyectado en Una calle mil caminos. El jurado acotó que: “Por su desempeño en un papel secundario muestra que está listo para empeños mayores, por lo que se le confiere una mención”.
Roly Chiong en una entrevista me dijo sobre el Alexis, gay, de Rompiendo el silencio, y el Yunior proxeneta de Vuelve a mirar:
“Por ejemplo, en Rompiendo el silencio, la historia fue basada en hechos reales, incluso se grabó en la misma casa donde sucedió todo; ahí ocurrió que el día de la grabación de la escena en la que Alexis y Leonel comen juntos en la mesa, el dueño de la casa, que era el personaje que yo interpretaba, estaba presente ese día en el set y sacó una foto que tenía guardada, de ese día, y resulta que la escena que mi papá había montado era igual a la de la foto, los mismos lugares, todo, y esto sin haber visto antes la foto. Fue impresionante, la verdad, algo que te pone los pelos de punta.
“Y con la telenovela Vuelve a mirar pasó que estaba haciendo también De Amores y Esperanzas y ambos personajes eran muy diferentes, entonces tuve un día grabación de la novela con Yunior y al día siguiente eran los abogados, y estaba en el bufete con Yunior que no me dejaba tranquilo, hasta que la directora me llamó y me dijo: ¡Eh!, esto está muy agresivo. Ahí caí y entonces, solté el personaje”.
En la actuación femenina Andrea Doimeadiós Peralta fue merecedora del premio por su papel en La hora de Noelia. El jurado aseveró “Con la Noelia de Andrea Doimeadiós la televisión ha vuelto a tener un personaje cómico orgánico, que puede crecer en el futuro, pero desde su primera aparición fue convincente”.
Se confirieron menciones a Grisell de las Nieves Monzón Rodríguez, por su personaje Daniela en Vuelve a mirar, en la que muestra “una actuación fresca y convincente” y Venecia Feria Borjas, por Juntos, pero no Revueltos, en el que “logró confirmar lo buena actriz que es en lo humorístico”.
Andrea, digo, Noelia me confesó en una reciente conversación:
“- ¿Por qué actriz? ¿Desde niña lo soñaste?
-Sí, desde niña siempre supe que quería ser actriz.
Esa respuesta, parece, me da pie para la conversación que tuve con Noelia Bermellón:
– Noelia querida, ¿me puedes contar como naciste?
– Nací como todo el munde. Tengo hermosos recuerdos de aquellos años. Transcurría el año 1994. Un período hermoso, especial. Nos emociona tanto ver las fotos que decidimos quemar los recuerdos.
– Y ese lenguaje tan… que usas ¿te lo ponen en el guion o inventas algunas palabras?
– Sí, amigue, tengo un guion que me suscribe, pero también tengo el coraje de poder expresarme de manera explícita.
– ¿Cómo te cae que Mónica siempre esté rompiendo la pared?
– ¿Qué pared? ¿Mónica rompió la pared? ¿Debido a qué? No entiendo, Paquita. ¿Le pasó algo a Mónica? Cuéntame, que no sé nade de nade
– ¿Te reconoce la gente en la calle cuando dejas trapos y peinados abultados?
-Primeramente, Paquita, te pido respeto que te estoy contestando esta entrevista en pleno horario de almuerzo. No uso trapos. Mi vestuario es de alta impostura y lo diseña Elio Vives. No comprendo la tacitez de tu pregunta porque el público me conoce por la sencillez.
– Si te reconocen, ¿qué te dicen?
– Me han dicho muchas cosas lindes. Que soy imponedora, invaluable y que cada vez se nota más mi ineptitud. Estoy muy agradecida, querida Paqui, ¿qué otra cose puedo decir?
– ¿Es verdad que vendrá otra tanda bermellónica?
– No puedo adelantar ninguna tanda, solo la tanda de Arte Siete porque soy amigue íntime de Martha Araujo.
– ¿Qué diferencias tendrá con la primera?
– Me hablas de diferencias y debo decir que soy defensora de la igualdad, desde una perspectiva indefendible. Paz y amor para tode el munde. ¡Les adore!
– ¿Qué sentiste cuando dividiste al público entre tus amantes confesos y los que no quisieron a Noelia?
-Es increíble cómo en un mismo núcleo familiar tengo detractores simpatizantes y seguidores inciertos. Hay mucha polimitización. Pero vamos a darle tiempo al tiempo para que los empatizantes simpaticen. Hay mucha polimitización. Pero vamos a darle tiempo al tiempo para que los empatizantes simpaticen”.
– ¿Qué lecciones sacaron tú, Doime y Mónica de esas reacciones?
– Infinitas enseñanzas. Ellos saben cantidad de cosas porque ya tienen una obra inmediática. Les agradezco tode.
– Algo más que desees decir
– Ahora mismo, así, no se me ocurre nade. Bueno, sí, que si alguien del pueblo sabe dónde puedo comprar aceite, que me lo ponga en mis redes sociales. Gracias, Paquita, por hacerme esta entrevista tan inverosímil. Voy a terminar de almorzar ahora. Gracias, y sígueme en mis redes sociales, que nunca es tarde si es temprano.”
(Tomado del Portal de la Television Cubana)
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