El hombre y su pasar por el mundo es la esencia de La Tribulación de Anaximandro: Hombre Arché, Ápeiron, ópera prima de la joven compañía danzaria Los Hijos del Director, la cual se presentó en el teatro Bayamo de la Ciudad monumento como parte de la gira nacional que por primera vez realiza.
El director y coreógrafo George Céspedes, junto a sus siete bailarines, muestra, a través de la ruptura de esquemas, del diálogo interactivo con tendencias del panorama danzario contemporáneo y de la experimentación, conceptos claves de la filosofía clásica griega mediante la cual conforma una nueva visión del hecho artístico.
Su peculiar equipo está integrado por Yerda Leyva y Aymara Vila, quienes provienen de Danza Contemporánea de Cuba; Álvaro Torres, actor, y Alexis La O Joya, parte del Laboratorio Nacional Electrónica y autor de la banda sonora de otras obras del coreógrafo.
Céspedes, según sus palabras, opta por guiar a sus artistas hacia esta línea coreográfica ya que siente especial interés en descifrar ese espacio divisorio entre lo que entendemos culturalmente como hombre y naturaleza. Lo trascendente, la evolución y lo identitario, son motivos de creación para este artista que parece encontrar, por momentos, una guía en Anaximandro, filósofo trasgresor en su época.
Por algo menos de una hora, el público es invadido por un ambiente de misticismo y dudas que se suman a la sensación de vacío y búsqueda infinita que lleva al desconcierto.
Los Hijos del Director, fundada en el año 2013, es una agrupación danzaria integrada por jóvenes que pretenden romper convencionalismos, al tiempo que se saben parte de una tradición en la que el conflicto entre el individuo y la sociedad es punto convergente.
Foto: Tomada de Cuba Contemporánea
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