Ya lo adelantaba ese gran amigo Luis Yuseff, director de Ediciones La luz, cuando afirmó que un momento especial sería siempre la presentación de los libros auténticos de la Colección Espejo, al reunir dos generaciones de escritores de literatura infanto–juvenil en un mismo volumen.
«De una cara se publica un cuento de un autor consagrado, -Ronel González-, con una trayectoria literaria que sirve de paradigma a las nuevas generaciones de escritores, por lo contemporáneo de su obra; y del otro lado aparece un autor joven, -Rafael González Muñoz-, nacido después de 1980, que destaca dentro de su generación por tener una obra de vanguardia».
Tal cual lo advertido por Yuseff en cada volumen se hermanan autores que mantienen cercanías estilísticas y temáticas, y dos deliciosos cuentos, Cuentos del Gato enamorado, de Rafael,y Una pizca de amor, Ronel , que no dejan de sorprender por sus historias que aunque no exceden las dos cuartillas son profundas en sus mensajes y contenidos, por un diseño de ilustraciones que permiten ser coloreadas.
Desde esa utilidad y diversidad de trazados en el original texto inició la presentación del novedoso libro, por uno de sus autores Rafael González, quien también en representación de la más nueva generación de escritores, supo a atrapar con su lozano y carismático verbo al muy versátil público presente en el pabellón infantil de esta feria, en Camagüey.
La participación masiva de los niños y niñas, junto a sus familias engalanaron los atractivos cuentos que Rafael González Muñoz, presidente nacional de la AHS, contó de manera amena en una mañana genial, junto al reconocido proyecto local de narración oral Catalejo de Cuentos.
Más los jóvenes coronaron a su Feria, pues activos “invadieron” su ya tradicional escenario, Carpa de la Reina, donde los noveles escritores de la AHS, junto a consagrados intelectuales cubanos, dialogaron acerca de los desafíos y empuje de la cultura cubana.
Esta vez la cita fue con un hombre extraordinario y muy controversial Chano Pozo.
La presentación del libro Chano Pozo. La vida. (1915-1948), por Reynaldo Angel Echemendía Estrada, maestro y folclorista camagüeyano, dejó entrever la valía de este grande del pentagrama musical cubano para las futuras generaciones de músicos.
Heidi Cepero, musicóloga y miembro de la AHS en Camagüey, afirmó que este libro es de obligada consulta para los estudiosos y expertos de adentro y fuera de la geografía nacional.
«No es solo un texto que aborda la vida y obra de Chano Pozo, sino uno que se remite a los orígenes de sus aportes musicales y a su marcada cubanía, la cual mantuvo y expresó en todas sus piezas musicales», reflexionó Cepero.
Estudiantes de la Escuela Profesional de Música José White participaron en este conversatorio, que recorrió junto a la autora del texto, Rosa Marquetti Torres, el camino de éxito de este importante y afamado músico.
Chano Pozo. La vida. (1915-1948) visibiliza más allá de la anécdota, la espontanea genialidad de un hombre que se impuso por su talento y que marcó hito por su contribución a la cultura musical cubana y al jazz.
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