En estos días tiene lugar en La Habana la 28 Edición de la Feria Internacional del libro. En este contexto se hace necesaria una mirada a la importancia de la lectura y el libro…
El libro lleva dentro lo que su creador quiso compartir con sus iguales. En esas páginas está el reflejo de esos ratos de silencio e intimidad, en los que un autor directa e indirectamente piensa en nosotros. La escritura existe para dar paso a la lectura, y ahí, entre los anaqueles, en un tomo, un pequeño volumen, entre páginas, es donde hallamos lo real, lo inverosímil, es ahí donde no hay límites para la sorpresa. En Cuba son múltiples los esfuerzos que se hacen para poner al alcance de la gente, libros de distintas temáticas…El estado consciente del papel esencial de la lectura en el desarrollo espiritual de la nación, cada año dedica recursos para que las librerías del país se mantengan abiertas.
Adentrarse en el mundo de la literatura es lanzar una extensión para nuestra vida, es viajar en el tiempo, vivir varios siglos y sobre todo crecer en espíritu; ser fiel a esa categoría que nos ha sido confiada para diferenciarnos del resto de las especies. Leer es una batalla ganada contra el analfabetismo y a favor del razonamiento. No mirar hacia ese arsenal que se deriva de la creación y de la fe que han puesto en nosotros tantos autores en ese camino de ofrecimiento, es abandonar un poco la fe en nosotros mismos.
La Literatura es inseparable de la vida. Adéntrese en el camino de la lectura, corra el riesgo placentero del descubrimiento, asuma la curiosidad como ley de la existencia humana y verá como ahí está casi todo. El poema que soñamos escribir;la historia que nos describe; las añoranzas dichas de manera insuperable y, sobre todo, ahí, hallará la libertad que se instala en nosotros luego del hallazgo de tantas rutas y modos de vida.
Las investigaciones recientes indican que cada vez se lee menos debido a la justificación generalizada de la rapidez con que se asume el día a día. En esa dejadez que algunos asumen y aceptan se niegan los tesoros de la condición humana, el saber acumulado durante siglos y se anula un poco todo lo bueno que pudiera arribar a nosotros, todo lo placentero que en el plano de la creación siempre está por llegar…La Feria del Libro ya es una realidad en estos días y además de la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña y las subsedes, las librerías del país siempre abiertas, resguardan para todos los dispuestos, varias sorpresas… Salga y busque algún volumen con el ánimo de encontrarse con el conocimiento, sorprenda a su capacidad de asimilación, léale a su hijos, acaricie un libro y penetre en su esencia, ahí están muchas claves para distanciarnos de la ignorancia, la soledad, pero sobre todo, ahí, aprenderá a darse cita con ese arte entero y verdadero con el que tantos autores nos trasladan su conocimiento como un abrazo de fe.
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social.