Larga vida a Stereo G

Porque todo empieza cerca del final. Comprobé ese verso de una de mis canciones favoritas cuando se hacían pequeñitas en la lejanía las luces del balneario Playa Caletones. Luego nos sucumbimos en la oscuridad de los casi diez kilómetros entre la playa y el poblado de Gibara, salvada por las luces de aquel Montero. Ansiaba que llegara el carro para comenzar a dictar impresiones.

En la oscuridad del monte entiendes a Ernesto Jorge Hidalgo Mariño (Tiko), organizador del Festival Nacional de Música Electrónica, quien se pasara casi todo el año preparándolo para recibir muy poco apoyo. Pero eso no se notaba, tuvo que decírmelo él. Claro, después de esperarlo todo el día por sus muchas ocupaciones. La espera no se hizo eterna, más bien duró poco ya que la magia de Stereo-G no puede describirse sino descubrirse.

Fundar un Festival de tal magnitud “era un gran sueño de cualquier Dj; tocar en una playa ayuda mucho para confeccionar tu sesión por la mezcla armónica entre naturaleza-música. La cita ha contribuido a la transformación de la comunidad costera hasta en la forma de percibir y consumir el producto cultural que muestra Stereo G, a través de la Asociación Hermanos Saíz�, asegura Tiko.

Este gran ciclón de música electrónica, fue concebido bajo el concepto de imbricar arte y naturaleza para llevar diversión y relajación a su público. La playa de Caletones es de arenas muy blancas y finas. En sus inmediaciones existen múltiples piscinas naturales producto del derrumbe de galerías inundadas que constituyen una importante atracción para el disfrute de los vacacionistas.

“El Festival es para cualquier tipo de público que asimile una cultura diferente. Lo mismo le puede gustar a una persona mayor que a un niño, todo está en sentir la música que se te avalancha como una «marea de sonido». La locación: música-naturaleza también es una vía para lograr relajarse y meditar. Por la posibilidad de sentarse en la arena es un escenario propicio para el yoga que aporta una espiritualidad e interacción con sus seguidores junto a lo místico que representa una fiesta a orillas del mar�.

Casi todos los grandes sucesos son en la capital del país y Dj Tiko escogió una de las playas que ni siquiera se sitúa en el municipio cabecera por varias razones: “El municipio de Holguín no tiene playas. Lo comencé en Gibara porque ahí fue donde me aprobaron un pequeño presupuesto, y en la primera ocasión Cultura colaboró con la producción, el audio, las luces y otros productos. Electrozona, por su parte, que fue el primero que lo hizo, gastó una elevada cantidad de dinero en la edición inagural. Entonces, al otro año se aprobó como festival nacional. En Gibara se desarrollaron las tres primeras citas�.

La séptima edición del Festival se realiza con la asistencia de unas 15 agrupaciones y Dj productores de varias provincias. Está presente la vieja escuela y por primera vez tuvieron un invitado internacional: el alemán Markus Knauth. Están presentes XandersBlá, Dian, Alexis de la O, Sali, Alain Dark, la gente del patio que incluye a TheTony’sScream, Luis A. Santana, Faleke y El Topo, y por último Electrozona, el anfitrión. Y el de Honor el también alemán Constantino Woge

“El festival ha crecido muchísimo desde su primera edición en 2012, pero siguen faltando cosas respecto a los temas de organización y producción muy medulares. Necesitamos más apoyo del Gobierno y de instituciones como el Comercio, Transporte y Comunales, quien por ejemplo debió limpiar la playa. Si somos inteligentes le podemos sacar provecho a este evento. Todo en aras de mejorar la visión y la estética del Festival�.

Recuerdo que esta —mi primera entrevista— fue en la cola para entrar al comedor. Tiko dijo dos minutos y al final hablamos cantidad. “Hay muchas ideas buenas y nuevas que deben ser mostradas al mundo. Recién tenemos a las empresas Heineken y Cubaron apoyando a Stereo G por lo que el año que viene debe ser mucho mejor. Todo es cuestión de organizarnos bien y pensar el Festival�.

Entonces en esa respuesta había augurado larga vida a Stereo G. Hay cosas que no se preguntan. Simplemente se saben.