El desarrollo de la música electrónica en el paÃs inició por Occidente, donde hoy ha ganado gran protagonismo en la programación cultural fundamentalmente de la ciudad de La Habana. Con el tiempo se fue expandiendo hacia otras provincias provocando que convivan en la isla diferentes formas de producción y ejecución que diferencian a una región de otra. De igual Stereo-G, Villalón, Leche Kortada y recientemente SONARTE, en las diferentes provincias, siendo La Habana y HolguÃn los espacios donde mayormente se ha consolidado el género. Estos eventos y festivales promueven el desarrollo del género en Cuba, extendiendo el consumo fuera de los lÃmites de la capital.
En Oriente se conoce que la producción de música electrónica inicia su desarrollo en los 90 influenciada por las tendencia y formas de hacer del contexto capitalino; considerándose de este modo HolguÃn y Santiago de Cuba las provincias pioneras en la producción de este tipo de música.
El producto musical que ofrecen los creadores del género está influenciado por los géneros contemporáneos a su surgimiento como productores musicales y hasta la fecha mantiene el mismo carácter y la misma fórmula, tanto para producir como para ejecutar, aprovechándose de los avances tecnológicos con los que han ido incorporando y asimilando nuevas técnicas y sonoridades.
La producción de música electrónica en Guantánamo hace su aparición a finales de la primera década del 2000 convirtiéndose de esta forma en uno de los movimientos más jóvenes del paÃs.
A diferencia de provincias como HolguÃn y Santiago de Cuba, con mayor experiencia en la región, la forma de producción, asà como la sonoridad de esta nueva generación en Guantánamo, asumen la creación desde otra perspectiva e incorpora nuevas maneras de hacer dentro del género a nivel nacional, logrando que su producto además de ser diferente pudiera llegar a tornarse controversial tanto para la crÃtica como para los mencionados productores ya consolidados en el género.
Analizando el corto tiempo de existencia del género en la provincia cabe reconocer que ha ocurrido un choque a nivel musical debido a la incorporación de una nueva cultura, insertada en la coexistencia con otros productos ya arraigados en el gusto popular, cuestión que ha dificultado su desarrollo desde el punto de vista de la promoción y por ende ha repercutido en los Ãndices de consumo del producto. No pretendo con esto atacar a los medios, que han apoyado la difusión de este nuevo producto, sobre todo a partir del programa radial Por Ahora de la Asociación Hermanos SaÃz (AHS), único intento para promocionar este género en la provincia, pero sà llamar la atención a decisores e instituciones que no han concientizado que la nueva propuesta puede ser un punto de apoyo para diversificar la programación cultural en la provincia, como propuesta novedosa y que goza de altos Ãndices de aceptación en la población joven.
Hasta hoy los espacios donde se pueda promocionar y disfrutar de este género en la provincia han sido variables, por el constante cambio de local, por ende continuamos invadidos por espacios nocturnos que insisten en promocionar los más vulgares mensajes en los productos musicales que ofrecen; incitando de esta forma a potenciar gustos banales y formas de comportamientos sociales que deterioran el modelo de ciudadano que lucha por construir nuestro paÃs.
Cabe destacar que el alza de estos géneros antes mencionados fue alcanzada de forma independiente y ha logrado desplazar la competencia institucional, lo que hasta cierto punto pudiera considerase una derrota del sistema institucional cultural guantanamero. Esta situación debe ser observada con detenimiento en la búsqueda de ofrecer alternativas para revertir este fenómeno y lograr asà que aquellos productos con alto valor artÃstico y, por ende nucleados dentro de una institución cultural, consigan el protagonismo que se merecen.
Nuestra provincia cuenta con jóvenes Djs productores que han logrado como principal mérito vincularse con otros músicos e incluso con la danza, despuntando ya como indiscutibles exponentes del panorama musical guantanamero con una interesante carrera como compositores de este y otros géneros afines. Es el caso de Dj Zevil quien produce gran parte de su obra para compañÃas danzarÃas como Médula con quien ha obtenido importantes resultados en el Grand Prix Vladimir Malakhov y para audiovisuales realizados por la Charabia Productions. Otro importante reto lo tuvo Dj J. Lewis (Jeafrei) quien junto a su madre, la pianista concertista Teresa Manzanares ofreció el primer concierto de este tipo en la provincia que dedicó a la ciudad y vinculó además a las artes visuales. Sus trayectorias también incluyen el trabajo con artistas plásticos, en montajes y diseños sonoros para exposiciones y performances, unido a los diversos intentos de mantener y consolidar una peña para continuar impulsando el movimiento electrónico en Guantánamo junto a los Djs Thor y K1000.
Del incesante trabajo de estos jóvenes y fundamentalmente de Dj J. Lewis surgió la creación del Festival SONARTE que en su primera edición en 2015 potenció el intercambio de Djs productores de todo el paÃs con el público guantanamero, un público que durante dos noches acompañó y disfrutó de propuestas interesantes y de alta calidad artÃstica. El Festival de música electroacústica SONARTE apuesta por la música original, los proyectos novedosos, asà como diversificar la programación y las ofertas culturales en la provincia, en aras de que los jóvenes guantanameros tengan otras alternativas para su disfrute.
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