Durante las Romerías de mayo, no importa si es tarde o temprano, noche o mañana. El día comienza a cualquier hora. Andares agitados, rostros sonrientes o extenuados y la confluencia de personas crean un ambiente inusitado. Las calles holguineras conducen a la creación. Les brota de sus entrañas un sabor a savia joven con sorbos de tradición. Cada esquina constituye un encuentro con el baile, la pintura, el teatro o agrupaciones musicales, cada puerta esconde una cita con la creación y el intercambio fructífero.
La diversión se traslada a guaguas, pasillos y parques. Muy dentro hay una suerte de amistad, donde nada es imposible.
Desde el 2013, blogueros de varias partes del país confluyen en ese ambiente, disfrutan, debaten, sueñan en grupo y “dicen con valor lo que otros callan por temor”, aupados en las Bloguerías, el evento más joven dentro del Festival Mundial de Juventudes Artísticas. Sus opiniones suelen rebotar en el interior de la biblioteca provincial Alex Urquiola, a unos metros del parque Calixto García, y salir por persianas y puertas.
Esta vez están La pupila insomne, Cambios en Cuba, La Joven Cuba, Mira Joven, Latidos de Cuba, miembros de la Casa de Los Cinco, de la Red en Defensa de la Humanidad y otros, incluidos Visión desde Cuba y más anfitriones.
El programa de actividades anuncia un “Tuitazo de la Solidaridad”, el día cinco a las 9:00 a.m., dedicado a la unidad latinoamericana, a los Cinco y contra el bloqueo, y la presentación del nuevo sitio web de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), a las 11:30 a.m. de essa misma jornada.
Los participantes llegarán también hasta tres universidades holguineras, para dialogar con estudiantes y profesores.
En la mente, persisten las imágenes de aquellos pasos iniciales en 2013. El ajetreo de Luis Ernesto Ruiz, coordinador principal, el apoyo de Alexis Triana y los demás miembros del Comité Organizador, los intercambios con Rosa Báez (La polilla cubana), Harold Cárdenas (La Joven Cuba), Carlos Alberto Pérez (Chiringa de Cuba), Karina Marrón (Espacio vital) y otros.
Muchos comenzamos en la blogosfera por el deseo de escribir, conocer más personas, reducir frustraciones personales, tener más libertad creativa y la posibilidad de mostrar talento para la literatura o la fotografía, de formar comunidades virtuales… La lista de posibles razones sería interminable. Durante estos días, escuchamos la voz y vemos los gestos de esos con quienes compartimos, sobre todo, en espacios digitales.
36 meses después algunos nos vemos otra vez en el mismo escenario, entre un mar de colores, anhelos y arte. Las redes sociales y los blogs vuelven a ser amplificadores de sensaciones, fotos y el encanto de un evento que cada vez tiene más adeptos en el país y más allá.
Las Bloguerías contagian y apasionan, buscan las esencias y no se conforman con el horizonte. Su interior es infinito, donde se cultiva la amistad y el amor hacia el “megafestival” de juventudes, Internet y el país.
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