Apreciar la literatura y enrumbar los primeros pasos en el desempeño literario, sobre todo de los jóvenes, fue el leit motiv de los escritores José Raúl Fraguela y Roberto Carlos Fournier, para convocar a la participación en el taller literario A partir de cero.
Desde marzo del 2016, la Casa del Joven Creador de Guantánamo ha acogido una vez a la semana a los interesados en desandar —más concientemente— los caminos de la lectura y la (re)creación de poesÃa y narrativa, teniendo como punto de partida las herramientas técnicas para desarrollar y enriquecer las obras individuales puestas a consideración.
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Uno de los instructores fundadores, Roberto Carlos Fournier, en cuya formación profesional los talleres literarios —primero el de Reinaldo GarcÃa Blanco, en Santiago de Cuba y luego el de la Casa de la Cultura Rubén López, de Guantánamo— tuvieron una importancia vital, asegura que a pesar de que ha transcurrido muy poco tiempo aún, ya se empezaron a recoger los primeros frutos del taller, entre ellos una primera publicación impresa de textos de siete talleristas, que bajo el tÃtulo de Renuevos, vio la luz durante la celebración de la pasada jornada de literatura La Isla en Peso; asà como uno de sus integrantes Reineris Betancourt, fue aprobado para una beca en el Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso.
Sustentado en la poca presencia de los jóvenes guantanameros en espacios literarios, eventos, concursos y otras actividades profesionales de ese ámbito creativo en la provincia, A partir de cero continúa una gran tradición de talleres, que han tenido lugar en la más oriental de las capitales provinciales y que se remontan a los finales del año 1968.
Con el apoyo del Centro Provincial del Libro y la Literatura, de los integrantes del Proyecto GrafomanÃa y de la Asociación Hermanos SaÃz, cada miércoles, desde hace un año, cuando el reloj marca las 6 de la tarde, los amantes de los libros y la Literatura en la tierra del Guaso —-notablemente en grandes escritores—, tienen la posibilidad de dedicarse a perfilar su quehacer, en una interesante iniciación que siempre comienza desde cero.
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Mi nombre es Jorge Luis Sánchez Feria, un pinareño que vive en Guantánamo y les aseguro que para mà esta es una experiencia fenomenal, donde me siento crecer al mundo literario.