Festival Internacional de Cine de Gibara


Veinte años junto al sueño de Solás

Luces, cámara…

Tras las curvas de la carretera, las montañas en el horizonte y el mar abriendo su azul, Gibara celebra el 20 aniversario de su Festival Internacional de Cine, creado por Humberto Solás en 2003.

Del apelativo inicial de pobre –humilde en su elaboración, pero actuante y movilizador, estético y ético–, amplió su diapasón para convertirse en una amplia cita internacional que permite el encuentro del cine institucional, alternativo e independiente; además de ser una apuesta por la democratización del audiovisual a partir de la utilización de las nuevas tecnologías, como pedía Solás.

Este año, del 1 y el 5 de agosto, FICGibara realizó su 17 edición, con el cine como epicentro pero en un “mar de artes” con la plástica, la música, la danza, el teatro… en ebullición constante, pues el gibareño espera el Festival, como Remedios sus Parrandas, Holguín sus Romerías de Mayo, Santiago su Fiesta del Fuego. Como parte ineludible de una identidad construida en el accionar diario. Por eso acompaña el desfile inaugural a lo largo de la calle Independencia. Toma fotos, sonríe… Sabe que el Festival ha sido un motor del desarrollo local de la región y, al mismo tiempo, un modelo de animación cultural; sabe que la ciudad –que aún mucho puede crecer y desarrollarse, por sus varias potencialidades– no sería la misma sin esta cita del cine y las demás artes.

El desfile, como es tradición, reunió a invitados, Comité Organizador, autoridades políticas y gubernamentales y el pueblo gibareño, su principal protagonista. La presencia del Teatro Guiñol de Holguín y la Compañía La Colmenita, dirigida por Carlos Alberto Cremata, aportó el colorido y la Banda Municipal de Concierto, los compases rítmicos y la alegría visible en esa calle de la villa.

Gibara tiene magia, mística, dicen muchos. Y en los días del Festival Internacional de Cine, los parques y la Plaza Da Silva van llenándose de vida. Humberto Solás se enamoró de ella. Filmó aquí escenas de varias de sus películas e inició la aventura artística que ha hecho que esta villa marítima de la costa norte de Cuba –la más próspera de la región en buena parte del siglo XIX e inicios del XX– cada año se llené de artistas de varias partes del mundo. Jorge Perugorría, que será nombrado en esta edición Presidente de Honor y recibirá el Lucía de Honor, continuó el sueño al tomar las riendas del evento en 2016. Hoy Sergio Benvenuto, su director, mantiene y potencia las búsquedas de su tío, el autor de filmes clásicos como Lucía, Celicia y Miel para Ochún. Por eso, en las cercanías de la Estatua de la Libertad, y con la música del Himno de Gibara, dejó inaugurada esta cita que celebra los veinte años del sueño fundacional de Humberto Solás.

El contraste de un cine humilde, de bajos recursos, independiente, con producciones de circuitos internacionales, convierte a FICGibara en una de las citas más importantes para el cine cubano. El Festival –que ha articulado una programación sólida– invita, sobre todo, al cine, a ver películas.

Gibara, acción…

Como en ediciones anteriores, un cine Jibá repleto de público fue sede de la gala de inauguración de la edición 17 del Festival. El espacio, con conducción del actor René de la Cruz, recordó especialmente la figura de Humberto Solás en estas dos décadas y la importancia de un evento así en la localidad; mientras la Orquesta de Cámara de Holguín, dirigida por el maestro Oreste Saavedra, interpretó temas vinculados a la memoria sonora del cine cubano y a la obra de Humberto.

Entre los momentos esperados de la gala –a la que asistieron las principales autoridades políticas y gubernamentales de la provincia, así como representación del Ministerio de Cultura y el Icaic, entre otros invitados– estuvo la entrega del Premio Lucía de Honor a la diseñadora de vestuario Violeta Cooper y al actor Luis Alberto García. Violeta ingresó al Icaic en 1965 y se formó con las diseñadoras María Elena Molinet, Diana Fernández y Miriam Dueñas. Fue asidua colaboradora de Solás, en filmes como Lucía, El siglo de las luces y Miel para Ochún. Además trabajó en películas como Los días del agua (Manuel Octavio Gómez), La bella del Alhambra (Enrique Pineda Barnet), El premio flaco (Juan Carlos Cremata) y José Martí, el ojo del canario (Fernando Pérez). Por su parte, Luis Alberto García es uno de los actores más conocidos y versátiles de la escena cubana. Graduado en el ISA en 1984, ha trabajado con directores cubanos como Tomás Gutiérrez Alea, Juan Carlos Tabío, Rolando Díaz y Fernando Pérez. Entre sus muchos premios y reconocimientos destacan los entregados por mejor actor en Cartagena de Indias por Clandestino (Fernando Pérez) y Zafiros, locura azul (Manuel Pérez), en Amiens por En la puta calle (Enrique Gabriel), en Viña del Mar por La vida es silbar (Fernando Pérez) y en La Habana (Coral en el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano) por Ya no es antes (Lester Hamlet).

Además le obsequió, por parte del Comité Organizador, un proyector al promotor gibareño Domingo Leyva y se presentó el jurado oficial. El de ficción está presidido por el director cubano Alejandro Gil e integrado por el promotor francés Xavier D’Arthuys, la actriz cubana Mirtha Ibarra, la productora Gabriela Maire (Bolivia-México) y la italiana Milena Fiore, editora y especialista en conservación. El jurado de documentales y animación lo preside la directora y productora Catherine Murphy, de Estados Unidos, la documentalista cubana Gloria Rolando y el productor Dermot Begley (Escocia-Estados Unidos). Mientras que el jurado de Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica (ACPC) lo integran Rafael Grillo, Berta Carricarte y Erian Peña. Además existen dos jurados colaterales, el de Cineclubes y un jurado joven, con 12 miembros.

Convocado por el Ministerio de Cultura de Cuba, el Icaic, el Gobierno de Holguín y el propio Gobierno de Gibara, junto a su director, Sergio Benvenuto Solás, el Festival contó con Suiza, Francia, España, Italia, Argentina, México, además de Cuba, entre los países participantes y se presentó una decena de largos de ficción, además de documentales, animados y cortos. El discurso de género atravesó muchas de las actividades, y junto al tema del patrimonio y otros asuntos pertinentes, aportaron la cuota teórica que ha sido también uno de los sellos de este Festival.

Además de la tradicional sala Jibá, se ha previsto que el cine regrese a la plaza pública gracias a una pantalla gigante facilitada por el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.

Un homenaje al 50 aniversario de la Nueva Trova, con intérpretes de la canción de autor de muchos puntos del país, entre ellos los trovadores holguineros, fue uno de los momentos en una programación musical diversa, que aspiró a llenar las noches con agrupaciones y voces destacadas, jóvenes jazzistas y hasta la música clásica y el canto lírico, junto a presentaciones de la propia Codanza, la Orquesta Sinfónica de Holguín y varios colectivos teatrales invitados al evento.

Con el sostén del Icaic y el apoyo inestimable y mayoritario de las distintas instancias del gobierno y las autoridades provinciales y municipales de la cultura en Holguín y en la Villa Blanca, el Festival Internacional de Cine de Gibara cumple su aniversario 20 y celebró su edición 17, una cita cargada de sorpresas que se realiza desde y por el cine.


Trébol Teatro: Las Hembras no lloran

Ay, en la Habana y cualquier lugar/

Quien se lleva por las aparencias/

Quien esconde toda la inocencia/

Quien no aprende a respetar.

  “Ciudad Hembra”

Trébol Teatro se ha ganado un espacio por derecho propio en el Festival Internacional de Cine de Gibara (FICG). Con la presentación de su éxito “Jacuzzi” (2017) y “Humo” (2018) en colaboración con Teatro Del Sol.  Con el lema “Un mar de Artes” y en palabras de Jorge Perugorría, presidente del FICG, la intención del evento es que confluyan todas las artes, en especial al arte joven del Oriente Cubano.

Este año se incluyeron los temas de géneros desde varias manifestaciones artísticas entre las temáticas del Festival, lo que brindaba la doble posibilidad al grupo de teatro holguinero de reincidir nuevamente en esta ocasión con una presentación de estreno: “Hembras”.

Bajo la dirección de Yunior García, esta es la primera obra del grupo donde la temática femenina es la principal trama. Aclaro para nuestros lectores rigurosos que tendré que prescindir de los elementos de la puesta en escena. La ausencia de un teatro en la ciudad (el cual sufre de una reparación capital hace varios años) ha sido un reclamo del Comité Organizador. Es que la presentación fue efectuada en la Casa de la Cultura de Gibara, espacio no tradicional para las artes escénicas, e imposibilitado de varias condiciones técnicas para una función como la iluminación y la escenografía.

Sin embargo el grupo se adaptó a las condiciones semi hostiles para brindar una función a público lleno, con actores de renombres entre sus sillas y varias docenas de jóvenes.       

Otra vez un fenómeno meteorológico en la sempiterna y enigmática Habana es el pretexto para un guión, aunque la situación no es novedosa y ha sido reiterada veces en diferentes obras de distintas artes.

Penetrada por el mar en el medio de la depresión (tropical), una casita de alquiler alberga a dos jóvenes Ana y Eva. El uso correcto de la metáfora país-cuerpo-circunstancias brinda la posibilidad de discursar sobre el país en crisis y acosado por el fenómeno meteorológico. Las dudas, miedos, prejuicios e ilusiones en contrapunteo de las dos jóvenes muestran tópicos trabajado por la compañía: el desarraigo, la diáspora, las utopías destrozadas, las realidades marchitas y los avatares de una ciudadanía rodeada por agua. 

Resulta acertado el uso preciso de lo tragicómico, la intertextualidad con una realidad vertiginosa y la crítica al uso y abuso de las imperante y tiránicas tecnologías. 

La irrupción de Lillith (portadora de un nombre bíblico maldecido y censurado) reclama su espacio como propietaria del alquiler y víctima de una típica agresión masculina, aporta a la trama nuevos discursos sobre los prejuicios y  acosos que sufren las mujeres. En este caso Lilith es la muestra obvia de una mujer rehén de la sociedad y sus funcionales prejuicios y opresiones. Las tres mujeres intentan escindir los mitos y desasosiegos que las persiguen, gravitando la ilusión de crear alianzas. 

Desde su nombre, Hembra, es la alusión a esa condición de la mujer y la reinterpretación de su lado más animal y biológico aunque no evade los discursos antropológicos. El erotismo con cierta dosis de sicalipsis no falta,  aunque no es lo esencial de la obra.

Sin embargo los discursos no son exclusivos y a veces rozan con estereotipos sociales, ni reinventan una compleja realidad de la que es víctima la mujer. La inserción en la banda sonora de la recién estrenada canción “Ciudad Hembra”, de Alex Cuba y Kelvis Ochoa  por el aniversario quinientos de la ciudad de la Habana, le da un tono sensual y actualizado. También el diseño alegórico y creativo del cartel de la obra es un algo bien favorable.  

Escena de la obra teatral Hembra (Tomada del perfil de Facebook de FICG)

En el caso del elenco es una gran fortaleza de la obra. Fue un gran atrevimiento darles protagonismo a dos estudiantes Jennifer Soriano Candedo (Ana) y Aimeé Mojena Aguilar (Eva) recién egresadas en actuación de la Escuela de Arte con sede en Bayamo. La obra prima que sirvió de examen final en una presentación especial de working in pogress en la ciudad de Holguín a finales de mayo demostró la importancia y confianza de Yunior García en los jóvenes talentos. 

En el caso de Jennifer Soriano demostró excelente dominio del guión y de los recursos dramáticos mostrando gran profesionalismo. En la actuación de Aimeé Mojena le resulto más difícil acoplarse. Es meritoria la actuación de Heidy Beatriz Torres uno de los principales pétalos de Trébol Teatro que muestra su progresiva madurez escénica y facilidad de desdoblarse. 

No creo que Hembra sea una obra feminista netamente. La obra muestra relatos universales sobre la endeble frontera del dolor que diario cruzan las mujeres. Pero su principal logro es la subversión de las lógicas machistas y el rol de la mujer en la sociedad cubana. Por eso su apotegma no puede ser otro que aquel dicho nuevo que reza: “Las mujeres no lloran”.  

 


De Gibara al mundo: Un mar de artes (+Fotos)

Este ocho de julio quedó oficialmente inaugurada la 15 edición del Festival Internacional de Cine (FIC) de Gibara. Hasta el sábado 13 de julio, este espacio multicultural tendrá propuestas cinematográficas en concursos, presentaciones escénicas y danzarias, exposiciones de artes visuales, paneles, talleres y los concurridos conciertos nocturnos.

Desfile inaugural del Festival Internacional de Cine de Gibara. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

El tradicional desfile popular por la calle Independencia, que sumó a varios unidades artísticas de la provincia de Holguín y a los invitados de esta gran fiesta de la artes, fue el aviso de que la aventura del cineasta Humberto Solás, creador fundador de este festival, ya se vive en la también conocida como la Villa Blanca de los Cangrejos.

“Los gibareños son los protagonistas. Este año nuestro gran objetivo es que vayan al cine. Ya las calles de Gibara están llenas de arte. Solo en la cultura está la libertad y en la cultura está el desarrollo. Esto es para ustedes, y sobre todos, para los jóvenes de las provincias orientales, porque es un privilegio tener acá, una muestra tan importantre de lo que es el arte contemporáneo”, afirmó en las palabras de apertura el presidente de su Comité Organizador, Jorge Perugorría.

Jorge Perugorría, presidente del comité organizador del Festival Internacional de Cine de Gibara (FICGibara) pronuncia las palabras de apertura del certamen cinematográfico. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

Las jornadas continuaron en el Cine Jibá, donde se entregaron dos de los premios Lucía de Honor en esta edición. Por su impronta en el séptimo arte le fueron conferidos al director de cine Fernando Pérez y la actriz Daisy Granados, a ellos se sumará el actor y productor puertorriqueño Benicio del Toro, quien lo recibirá en la noche de clausura del Festival.

La actriz cubana Daysi Granados luego de recibir el Premio Lucía, otorgado por el Festival Internacional de Cine de Gibara (FICGibara), durante la jornada inaugural del certamen cinematográfico. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

El cineasta cubano Fernando Pérez recibió de manos de Laura de la Uz el Premio Lucía, otorgado por el Festival Internacional de Cine de Gibara (FICGibara), durante la jornada inaugural del certamen. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

En esta gala también se reconoció al actor Rubén Darío Salazar, por su trabajo durante 25 años con Teatro de las Estaciones, grupo que regaló, en el programa dedicado a la niñez y adolescencia, la puesta Niña con alas, acompañados por la cantautora Rochy Ameneiro.

Jorge Perugorría entregó un reconociendo especial a Rubén Darío Salazar, director del grupo Teatro de las Estaciones, de Matanzas, por los 25 años de fundada la compañía. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

Más de 50 propuestas cinematográficas y 15 guiones optan porpremios Lucía en las categorías de Largometraje y Cortometraje de Ficción, Largometraje y Cortometraje documental, Cortometraje Animado, Cine en Construcción y Guion inédito.

Nido de mantis, por Arturo Soto, El juego de la silla, de Ana Katz y Los días que vendrán, por Carlos Marqués-Marcet son algunos de los largometajes en competencia. El filme cubano Insumisas se presentará de manera especial dentro de las actividades y como un clásico restaurado la gustada Fresa y Chocolate.

Artistas invitados y participantes al desfile inaugural del Festival Internacional de Cine de Gibara. Foto: Juan Pablo Carreras/ ACN.

El primer día del Festival cerró con la actuación, en la Plaza da Silva, de los cantautores Kelvis Ochoa y David Torrens, acompañado por el pianista Rolando Luna, en una presentación homenaje a Silvio Rodríguez y Pablo Milanés y al Grupo de Experimentación Sonora del ICAIC. Seguidamente subió al escenario Isacc Delgado, en una presentación que llenó de energía y salsa la madrugada.

Para las próximas noches se tiene previsto conciertos del español Fermín Mugurza, Nøgen, Zeus, Telmary y Habanasana, Toques de Río, Cucú Diamantes, Kba Libre, Nube Roja, Santiago Auserón (Juan Perro), Pancho Céspedes, Eliades Ochoa y el grupo Patria. En la clausura actuarán Habana Abierta y Cimafunk.