exposición colectiva


Compás #1: Jazz Namá a ritmo del Caribe (+Galería)

La jornada del día 25 de febrero ha superado nuestras expectativas. Cuando Nataly Ruiz, presentadora de nuestra cartelera, hizo sonar el primer compás, Santiago de Cuba volvió a ser epicentro de la buena música.

 

Esta (la primera) jornada del Jazz Namá nos regaló llegó la exposición colectiva virtual Raíces y compás. Una muestra donde se aborda la presencia africana en nuestra ciudad, captada por la magia de los lentes y pinceles de un grupo de jóvenes santiagueros. En las palabras del catálogo, la historiadora del arte Sara Valdés Legrá afirma:

El género jazzístico emprendido por jóvenes talentos de la ciudad héroe ya tiene un plató amplio de presentación, un espacio propicio que lo da a conocer y ahora lo afirman estas fotografías que hoy se exponen en esta plataforma online que lleva por título: “Raíces y compás”.

Como joven expresión sonora, y por demás, venida de las ágiles manos de esta generación, la más fresca con la cual cuenta la ciudad, posee un sugiéneris compás. Todo bien concatenado, tanto imagen, desde el punto de vista técnico, compositivo, cromático y temático, siempre sin dejar de lado ese compás del santiaguero que es bicharachero, locuaz, muy extrovertido y en constante movimiento, expresión por antonomasia de los valores raigales que nos definen como ese cuero del tambor del cual bebe el jazz en Santiago y lo hace merecedor de un sello distintivo, dentro del género, en todo el país.

Asimismo, se advierte fotografías como las de marcado énfasis en las formas, y que por el poderoso poder del monocromo que las embisten, se encuentran dentro de los ejemplares de plausibles reconocimientos, sobre todo por el sentimiento con el que se perciben los personajes retratados en ellas.

Y qué decir de las muestras de la cotidianidad de las calles de nuestra ciudad con los tambores que no faltan en el género musical sobre el escenario de sitios tan emblemáticos como el Iris Jazz Club, que a él le rinde tributo siempre que abre sus puertas”.

Yadasny José Portillo Herrera, reconocido pianista, arreglista y compositor, Director del Grupo Cauce, protagonizó el estreno de las cápsulas Jazz Namá Plus. Esta es una iniciativa que se muestran por primera vez (desde que fuera fundado el evento) y sirven para presentar a los grupos y artistas que participan. Portillo pertenece al catálogo del Centro Nacional de Música de Concierto, y desde el 2003 se ha estado presentando como pianista junto al destacado bailarín cubano Carlos Acosta, en los más importantes escenarios internacionales. Su figura prestigia indudablemente el Festival.

El movimiento jazzístico dentro de la ciudad va respaldado de estilos marcados dentro de la comunidad de músicos que desde aquí emergen y se posicionan con su hacer. Camilo de Bess asegura en su cápsula promocional: Para mí el Jazz es lo más realzado de la música clásica unido con la música popular, una mezcla de las dos corrientes. El programa del evento nos regaló para el cierre de esta primera jornada el concierto de su grupo Jazz D´ Bess. Uno de los anfitriones y que por tercer año consecutivo tiene, bajo su responsabilidad, el concierto inaugural.

El Jazz Namá propone para la segunda jornada más cápsulas promocionales, challenges y conciertos. El momento especial del día, con transmisión en vivo, será el encuentro con los directivos y artistas vinculados a la Casa del Caribe. Esta institución recibirá a nombre de todos los miembros de nuestra filial, un reconocimiento por los 40 años de la Fiesta del Fuego. La Casa del Caribe y su Festival han servido como plataforma para que confluyan en la ciudad de Santiago tradiciones de muchas culturas con una raíz común: África.

Es un privilegio para la ciudad poder contar con la Casa del Caribe y toda su historia. Es una necesidad para la joven vanguardia (AHS) honrar ese legado que ha construido y salvaguardado parte de lo que somos. Santiago de Cuba es muchas cosas, pero algunas serían solo memoria y olvido, sin la Casa de los hombres y las mujeres que portan/piensan/y construyen la cultura de la región.

 

fotos frank lahera


Compartido en línea (+ fotos)

Desde Marshall McLuhan acá vivimos “conectados” a una “aldea global” mutable y expansiva, un espacio que sobrepasa sus límites en las posibilidades de Internet y la realidad virtual. Aquí, según Derrick de Kerckhove, el lenguaje digital posibilita una sociedad interconectada con un gran impacto en la industria cultural y artística. Y en este punto, las exposiciones virtuales permiten dar un paseo “en línea” por el arte empleando un teléfono móvil o una computadora, sin acudir a espacios físicos y desde cualquier sitio con conexión a las redes.

tomada del perfil de facebook de los artistas

Esta es una plataforma interactiva, visualmente dinámica, construida enteramente con el lenguaje y los herramientas narrativas de la web: hipertexto, contenido multimedia, recorridos multidireccionales, uso de contenidos digitales de entornos sociales, participación de los usuarios en la elaboración de comentarios, conexión con otros espacios virtuales para la expansión de las informaciones… Por otra parte, la potencialidad gráfica y visual y la naturaleza multimedial del espacio digital, constituyen un campo inigualable para la exploración de experiencias basadas en una nueva sensorialidad activa del espacio-espectador-participante. Lo que nos permite el medio digital –a diferencia del contexto físico– es la “interconexión infinita”, la apertura múltiple a otros contextos, el reaprovechamiento de los contenidos culturales ya presentes en la red para enriquecer los propios, expandirlos, revisarlos, reubicarlos o repensarlos. Nos encontramos así con un conocimiento distribuido y disgregado que discurre por una diversidad de entornos de socialización y de re-apropiacion (Facebook, Twitter, YouTube, Instagram, Telegram, Google).

tomada del perfil de facebook de los artistas

En el escenario actual, donde la Covid-19 ha obligado al cierre de galerías y museos, crece el “traslado” de los escenarios físicos a los espacios virtuales, no como alternativa sino como realidad objetiva. Gracias al mundo virtual (Google Arts & Culture), las más reconocidas pinacotecas han mantenido sus salas abiertas al público: desde el MoMa (Sophie Taeuber-Arp), el Reina Sofía (fotografías realizadas durante la Guerra Civil Española), la Uffizi Gallery (Piero Di Cosimo), el Dolores Olmedo (Frida Kahlo) y The National Gallery, de Londres (Monet), hasta los museos, espacios galéricos y páginas personales cubanas y también holguineras.

tomada del perfil de facebook de los artistas

Pero las exposiciones virtuales no son reproducciones digitales de los espacios expositivos analógicos, y no pueden pensarse en términos de distribución en el espacio de objetos físicos que se recorren secuencialmente según un itinerario espacial a través del cual se construye un discurso. Por el contrario, una exposición digital constituye un proceso de interacción basado en la conexión multisecuencial de ítems de información (visuales, textuales, sonoros) en un entorno de intensa potencialidad gráfica y visual que, lejos de presentarse como sustituto de la interacción natural entre el sujeto y el objeto, es susceptible de propiciar nuevas experiencias basadas en las propias posibilidades de lo digital.

tomada del perfil de facebook de los artistas

En este espacio “abierto y expandido” que es la virtualidad, que genera nuevos “pactos de lectura y consumo”, y sabiendo que la “imagen” no es sino un “sucedáneo” de la obra, la condición digital difunde en múltiples direcciones el discurso de la exposición y nos hace partícipes “en línea” de una atractiva muestra de jóvenes creadores holguineros miembros de la AHS y en su mayoría salidos de las aulas de la Academia de Artes Plásticas El Alba, noveles artistas que actualmente –lo sigo afirmando, como escribí en otra ocasión– integran parte de lo más interesante y sugerente de lo que podríamos llamar la vanguardia visual en Holguín. A ellos, a sus obras, tenemos que seguirlos no solo en las galerías, sino también “en línea”.

En Manzanillo, julio 10 y 2020.

*Palabras del catálogo de la exposición colectiva En línea, de jóvenes miembros de la AHS en Holguín, inaugurada en la galería de la Casa del Joven Creador de esta ciudad, el pasado 15 de julio.

tomada del perfil de facebook de los artistas

tomada del perfil de facebook de los artistas

tomada del perfil de facebook de los artistas

tomada del perfil de facebook de los artistas

tomada del perfil de facebook de los artistas

tomada del perfil de facebook de los artistas


Eternos “sintomáticos”

“Sintomáticos”, el título de la exposición colectiva de 11 artistas visuales afiliados a la sede de la UNEAC en Cienfuegos, parece —además de una genialidad— una provocación. Y si bien el arte no es necesariamente un acto de provocación, al menos debe tener cierta dosis.

En el caso de la exposición colectiva “Sintomáticos”, que permanecerá en la galería Mateo Torriente desde el 16 de julio hasta el 31 agosto de 2020, la provocación está presente y no solo en el título: ahí está por ejemplo esa obra tan caricaturesca de Julio Ferrer, en la que unas maracas con forma de nuevo coronavirus aluden a la manera en que empezamos a ser, todos, poco más que un montón de potenciales sintomáticos.

  • “El arte es como un virus que enferma sigiloso a sus actores y el mejor antídoto es la consumación de la obra. Los nuevos tiempos exigen puntos de vista también novedosos en la creación artística, intentando que esta nos sirva como terapia, cura salvación”, escribe en el catálogo Adrián Rumbaut, participante y curador de la exposición colectiva, quien accede a responderme algunas preguntas.
  • obra de Juan Karlos Echeverría

¿Quiénes participan en la exposición?

Son nueve artistas que viven en Cienfuegos (Annia Alonso, Néstor Vega, Juan Karlos Echeverría, Ández, Alfredo Sánchez, Vladimir Rodríguez, Camilo Villalvilla y el propio Adrián Rumbaut); y tres, que son miembros de la Uneac pero en este momento se encuentran en otros países: Alemania (Pavel Miguel), Canadá (Julio Ferrer) y México (Yanet Martínez).

¿Cómo se hizo la selección?

Yo que era el curador comencé a indagar y empecé a ver cosas en las redes y a determinar lo que me interesaba y lo que no. Me pasó que no había visto lo que había hecho Yanet, la que está en México. Entonces le pasé un mensaje para pedirle que me actualizara. Y, al ver sus obras, le contesté: “se presta”. Casi todo se armó por vía digital.

Entonces hay una obra de Juan Karlos Echeverría que se llama “Sintomáticos”. Esa obra él la hizo como en abril. Como pensé que nos hacía falta un título tan fuerte como la circunstancia, tomé el de Echeverría para, además, hacer una metáfora entre la verdadera sanación que puede provocar una vacuna real, y la sanación que puede provocar la creación artística.

Adrián Rumbaut (Foto de Autor)

Y también es como una manera de reflejar ese impulso creativo que el aislamiento (voluntario o involuntario) provoca en algunos artistas…

Yo creo que hoy, una vez finalizado el aislamiento, aún no sabemos lo que está realmente dentro de nosotros. El tiempo es quien lo va a decir. Al principio, los humoristas gráficos invadieron las redes. Ellos son la proa de los creadores: tienen más que ver con la parte instantánea. Pero después vienen otros creadores que necesitan un tiempo más prolongado para realizar su obra. Incluso, hay algunos que no se dan cuenta hasta que llega un momento de sus vidas donde “explotan”. Aquí en la exposición colectiva hay un poco de todo eso.

¿Las obras tienen que ver de manera directa con la Covid-19?

Hay algunas que aparentemente no tienen nada que ver. Pero tú ves, por ejemplo, las piezas de Camilo Villalvilla, que son cuatro dibujos sin ningún tipo de tratamiento intencional a la temática, y encuentras aislamiento, confinamiento, posibilidades contenidas.

Tu obra que se mantiene en la misma línea gráfica de la imagen del Che y Marilyn, pero…

Lo novedoso está en que yo siempre había trabajado esa imagen en la pintura, en el dibujo y la fotografía, pero nunca la había trabajado con sellos de correo. Y el sello de correo es la comunicación. Bueno, tu generación no es de escribir cartas, pero yo cuando joven escribía muchas cartas. Y el sello es como la garantía de que eso vino de otro lugar. Son sellos reales, por cierto. Calados, unidos. Es un trabajo gráfico y artesanal.

Como conclusión de la cuarentena y de la exposición colectiva, ¿se puede decir que un artista tiene mayor facilidad para enfrentar el aislamiento?

Yo creo que sí, compadre. Creo que un… No me gusta utilizar la palabra intelectual. Creo que un creador puede sobrevivir mejor a circunstancias de este tipo. Yo necesito estar aislado para trabajar, por ejemplo. Pero en este caso también aproveché para dormir, para estar con mi familia. Si a mí me preguntaran por las ventajas del aislamiento, las tres que yo recuerdo son: estar cerca de mis hijas más tiempo que nunca, descansar lo que no había descansado en décadas y probarme como un elemento imprescindible en la familia, quien es responsable, además, de la salud de sus padres y abuelos.

 


ADENTRO/AFUERA: una reflexión visual en exposición online

Como una de las tantas acciones que se han estado llevado a cabo en los días en que transcurrió las Romerías en Casa –alternativa del importante festival de arte joven de Cuba y el mundo organizado por las AHS y entidades culturales de todo el país– se ha establecido como plataforma principal de acción las redes sociales y las plataformas digitales, una manera para evitar la proliferación de la covid-19.

Se han visto conciertos, filmes, textos, forodebates y exposiciones virtuales, lo que ha ampliado las posibilidades y servido de acompañamiento joven a todos. Una de esas iniciativas es la exposición colectiva online ADENTRO/ AFUERA, organizada por la filial de la AHS de Santiago de Cuba y ProbetaFilms, productora audiovisual, y que ha convocado a través de redes sociales a jóvenes artistas.

Malas palabras-Autor Daniel Martínez Reyes 2020

Fueron seleccionadas un total de 13 obras, fotografía y arte digital, de los artistas Alejandro Álvarez (Camagüey), Argel Ernesto González Álvarez (Camagüey), Daniel Martínez Reyes (Camagüey), Edgar Brielo (Santiago de Cuba), Rocío Cruz Toranzo (Santiago de Cuba), Tahymet Muñagorri (Camagüey), Yoel Marrero González (Matanzas) y Yuris Elias Seoane (Santiago de Cuba), bajo la curaduría de Frank L. O´Callaghan.

La muestra, que se inauguró en las plataformas digitales y redes sociales en el contexto de las Romerías en Casa, se encuentra posible para todos los interesados en ver esta diversidad de interpretaciones a través de la dirección electrónica https://frankcineyartesvisuales.blogspot.com/2020/05/exposicion-colectiva-online.html.

de la serie Soledad-Autora Rocío Cruz Toranzo 2020

En esta exhibición online se pueden encontrar instantáneas bajo la dinámica de la fotografía documental (siendo la mayoría de las propuestas) y otras más creativas como retrato, paisajes oníricos y abstracciones visuales, bajo la técnica digital la mayoría de los autores reflexionan entorno al individuo y la colectividad, las relaciones, el encuentro, la nostalgia, entre otros temas.

En estas obras, usted puede encontrar una reflexión a favor de los semejantes y de la sociedad, cuando tanta falta hace, ahora más que nunca, pensar en el otro y la importancia de tenerlos presentes.

Arte de calidad lleno de pensamiento y hermanamiento en el entorno digital, que cada día sirve de universo para iniciativas como esta, porque no hay “Hoy sin ayer” y no habrá “Hoy si no se piensa el Mañana”.

Retos del movimiento-Autor Alejandro Hernández 2020

Título Perdóname Padre-Autor Argel Ernesto González 2020

de la serie ¨Aislado¨ titulo Sin titulo-Autor Yuris Elias Seoane 2020