Adriel Bosch
Adriel, el incansable
De Adriel Bosch Cascaret admiro su tenacidad. Ese espÃritu incansable de hacer las cosas mejor, de innovar, de halar a los otros aprovechando el talento individual. A veces me resulta súper humano (su tamaño influye), pero, sobre todo, la grandeza de espÃritu, el conocimiento, la sensibilidad y la bondad.
Al jefe (como a veces le digo, aunque no le guste) las palabras para describirlo se quedan cortas, imagÃnese el reto y la presión que implica entrevistarlo, a sabiendas, además, de las mil y una historias que ha vivido y contado entre las paredes de Venceremos, y más allá.
Pero a mà no se me da bien incumplir los encargos, y la sección Venceremistas tenÃa que, por justicia y compromiso, hablar de él, de su impronta como periodista, lÃder, colega, amigo…
La primera piedra
Quien conoce a Adriel sabe que por naturaleza es un ser inquieto, por eso no me sorprende cuando al preguntarle sobre su vocación periodÃstica revela que la descubrió desde niño, mientras simulaba con juguetes de madera y retazos (en pleno perÃodo especial), pequeños set de TV o de radio para entrevistar a amigos y familiares (la abuela, los primos…).
“En aquel tiempo existÃan grabadoras de casetes, y yo las usaba creyendo que estaba en la radio. A las entrevistas también quise incluirles música. Luego me interesé más por la escritura.
“Con la claridad de mi vocación por el periodismo, entro en el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas José Maceo, donde tendrÃa más posibilidad de acceder a la carrera. En ese perÃodo el Venceremos lanza la convocatoria para nombrar una sección (hoy llamada Contigo) dedicada a los lectores más jóvenes, y envié mi propuesta. En la tercera edición de la sección (aún sin nombre), Elena Baró, redactora del espacio, publica mi carta, y a ella le agradezco el vÃnculo con Venceremos. Cuando vi mi nombre en el impreso, fue gratificante.
Con la carta, el primer escrito de Adriel en Venceremos, cuyo ejemplar yace en el archivo que guarda la memoria histórica del medio, inició el camino el joven periodista como colaborador del periódico en la sección Contigo… (sobre todo, de sucesos relacionados con la historia de la provincia y curiosidades). También escribió notas informativas del quehacer estudiantil… en fin, que era un profesional más de la prensa, aunque sin el tÃtulo.
“Al momento de optar por Periodismo, llegaron pocas plazas y me tocó Historia, pero al concluir 12 grado, fui para el ‘ejército’ con la idea de pujar por mi principal vocación, y la obtuve por concurso en 2006.
“Conmigo pasaba algo curioso, porque estando en la Vocacional me vinculé mucho a la Asociación Hermanos SaÃz, a la promoción de eventos, como la Jornada de la Canción PolÃtica, donde llevaba artistas a la radio… y ahà creé otro nexo que fortalecà en las prácticas al pasar por todos los medios. En el caso de la TV, colaboré igualmente en programas como Veraneando, Asà Somos y Algo Diferente…
“Otra experiencia que me marcó fue la oportunidad que me dio Elena Baró, quien antes de jubilarse me entregó la sección Contigo, siendo yo un estudiante, y por tres años la escribà junto a Diversidad, que sale en el LomerÃo.
“Recuerdo que venÃa a Guantánamo desde Santiago de Cuba, y me pasaba el sábado entero en el periódico para redactar las secciones. La gente escribÃa mucho entonces, de 10 a 15 cartas semanales con poemas o solicitando temas, y las llamadas eran constantes, pidiendo saber de artistas. Contigo era muy popular, y me ayudó a valorar la importancia de contar con la opinión de los lectores.
“En quinto año, cuando se otorga la ubicación, yo tenÃa la seguridad de que en el Periódico estaba mi plaza, y asà fue.
“En casa siempre hubo hábito de leer la prensa, oÃr la radio y ver los noticieros, por eso me siento cercano a los tres medios, pero prefiero el periódico, y ahora el entorno digital también me gusta, me permite visibilizar mis inquietudes audiovisuales y creativas gracias a la multimedialidadâ€, apunta.
Mi casa
Durante la universidad, Adriel fue alumno ayudante de Periodismo Radiofónico, dirigente estudiantil los cinco años, e incluso, hizo crecer la membresÃa de la Asociación Hermanos SaÃz como realizador radial en 2008; y en su graduación en 2011 resultó el alumno más integral de su Facultad y uno de los tres de la Universidad de Oriente. Con su expediente de mérito, cualquier medio le habrÃa abierto las puertas, inclusive, más allá de la provincia, pero un compromiso con Venceremos lo hizo quedarse.
“Con este colectivo me siento en casa. Cuando llegué recién graduado ya conocÃa a todos, llevaba años escribiendo; en este 2022 cumplà 11 años de egresado, pero sumando tiempo atrás, tengo casi dos décadas aquÃ.
“Es el medio donde me siento bien. Nos conocemos y estamos en función de un mismo objetivo, no como otros que tienen más áreas y especialidades. Pensé en irme, pero me quedé, y hoy mis planes no están en otro lugar.
“Soy vicepresidente de la Unión de Periodistas de Cuba en Guantánamo y miembro del Registro del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente, estuve siete años en la TV, participo en proyectos, organizo eventos…, y eso ha sido posible porque el medio me lo ha facilitado.
“Yo vengo a Venceremos de lunes a lunes, estoy más tiempo aquà que en casa. Sé cuando debo entrar, pero no cuando salir. He estado hasta tres dÃas seguidos en la redacción, por algún hecho noticioso o una cobertura especial, como el paso del huracán Matthew.
“Me desempeñé siete años como subdirector del periódico, antes fui redactor reportero, gestor de redes sociales y jefe de Información. Como subdirector me tocó impulsar y protagonizar las transformaciones hacia un medio multiplataforma, con perfiles en casi todas las redes, y asumir nuevas prácticas como los seguimientos minuto a minuto, forodebates, entrevistas online…, para llegar a más público.
“Incluso, tenemos un estudio de producción multimedia por esfuerzo propio, fruto de la innovación en medio de la escasez de tecnologÃas, y también del trabajo en equipo. Hoy somos el medio lÃder del territorio en transmisiones en vivo, pero además nos enfocamos en formar bien a los estudiantes en sus prácticas, y en compensación cada año hay más muchachos interesados en estar con nosotrosâ€.
Como director recién estrenado los desafÃos son mayores, pero tiene madera para vencerlos. El equipo lo secunda.
Periodista todoterreno
Adriel vive para el periodismo. En el tiempo que lleva de oficio ha escrito de todo (o casi todo) “se es periodista o noâ€, afirma cuando le pregunto de su predilección por el deporte o la cultura, en ambos con premios nacionales. La práctica es la que define todo.
“Yo soy periodista, y como tal defiendo esa profesión, que cuenta con un reconocimiento social relevante, por la responsabilidad de informar y estar informado, y por la preparación constante que implica. Es cierto que tenemos limitaciones, el modelo de prensa por muchos años fue excesivamente triunfalista, y aunque viene cambiando, no todos los medios lo han hecho a la par.
“Tenemos deudas con el periodismo de investigación y la crÃtica sistemática, porque como prensa debemos denunciar todo lo mal hecho, por el compromiso que tenemos con la Revolución, el proceso social que nos ha hecho libresâ€.