Tomado de Periódico ¡ahora!
En Holguín, la Asociación Hermanos Saíz se fortalece
La Asociación Hermanos Saíz (AHS) es una organización de carácter nacional, fiel exponente de la cultura, desde su fundación, el 18 de octubre de 1986, agrupa a la joven vanguardia artística e intelectual del archipiélago cubano.
La filial holguinera se encuentra inmersa en el periodo final de un nuevo proceso de crecimiento de su membresía, como parte de su trabajo continuo después de su IV Congreso, desarrollado el pasado año.
Este proceso comienza cuando los interesados en ingresar a la Asociación presentan una solicitud por escrito ante la Dirección Provincial correspondiente, con un currículo artístico-literario y una muestra de su obra. El modo en que se realizará el proceso de ingreso se establece en el reglamento de la Organización.
El vicepresidente de la organización en el territorio, Dagner Parra Almaguer «DJ Whisper» apunta: «Para ser miembros de la AHS los jóvenes escritores, artistas y promotores culturales de hasta 35 años deben aceptar los estatutos y que les sea aprobado el ingreso después de analizado su currículo. Cuando el asociado arribe a los 36 años cesará en su condición de miembro».
Para complementar la labor de los asociados en el territorio se organizan eventos como las Romerías de Mayo, el Festival de Teatro Joven, el Premio Celestino de Cuento, Stereo G y otras jornadas, eventos, peñas y espacios habituales que le posibilitan a la vanguardia artística desarrollar su labor.
Junto a las actividades que son parte rectora de la AHS, la organización en Holguín tiene la irrenunciable tarea de defender la libertad creadora y la obra artística y literaria de sus miembros sobre la base de principios éticos, favoreciendo la valoración crítica y rechazando cualquier tergiversación o manipulación del arte en contra de la Revolución.
Desde hoy en Holguín jornada de crítica de artes visuales
La sexta jornada de teoría y crítica de artes visuales “Un disparo en el hueco” tendrá lugar del 11 al 14 de septiembre en la provincia de Holguín con la presencia de personalidades del gremio que abordarán el género desde diversos espacios.
Yurisel Moreno, directora del Centro Provincial de Artes Plásticas, explicó en conferencia de prensa que el evento tiene el objetivo de actualizar los aspectos que giran en torno a la producción y el pensamiento artístico tanto en Cuba como en el mundo mediante el intercambio con especialistas para desarrollar la formación de los profesionales dedicados a la crítica.
Entre los invitados de la presente edición se encuentran Nelson Herrera Ysla, especialista del Centro de Arte Contemporáneo Wilfredo Lam; Jorge Núñez Motes, profesor de la Universidad de las Artes y Tania Dranguet Guerrero, jefa de sección de crítica e investigación de la Asociación Hermanos Saíz en Santiago de Cuba, manifestó.
Moreno destacó, además, que la inauguración tendrá lugar con la exposición “El ruido, el silencio”, del artista visual Cristhian Escalona, en la Sala Transitoria del Centro Provincial de Artes Plásticas, mientras que la muestra “No es tiempo de flores”, de Bertha Beltrán, clausurará la jornada.
Un disparo en el hueco, evento con frecuencia bienal, fue realizado por vez primera en el año 2014 y promueve las nuevas formas de abordar el arte mediante intercambios y conversatorios con versados del medio.
Convocan a participar en el Concurso Nuevas Voces de la Poesía
Con el objetivo de promover y visibilizar a poetas emergentes en el panorama literario nacional, la 24ª edición del Concurso Nuevas Voces de la Poesía mantendrá abierta su convocatoria hasta el 15 de diciembre de 2024.
En esta ocasión el certamen estará dedicado al 95 aniversario del nacimiento de la holguinera Lalita Curbelo Barberán (1930-2002), una de los voces poéticas de la Generación del Cincuenta, que ha dejado una huella significativa en la poesía cubana.
El concurso está abierto a todos los autores residentes en Cuba, sean o no miembros de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), que sean menores de 35 años y que no tengan obra publicada. Los participantes podrán presentar un poemario de tema libre con un máximo de 15 cuartillas. Las obras deben ser enviadas al correo electrónico premionuevasvoces2024@gmail.com, utilizando un seudónimo. Además, se requiere que los autores envíen una plica en un documento separado con sus datos personales y forma de contacto.
La premiación del Concurso Nuevas Voces de la Poesía 2024 se realizará el 4 de febrero de 2025, en una ceremonia que formará parte de las actividades en homenaje a Lalita Curbelo. El ganador recibirá un diploma acreditativo, una colección de libros y la publicación de su obra por Ediciones La Luz en la colección Analekta. Además, se llevará a cabo la grabación de su obra en formato audiolibro.
Con la realización anual de este concurso, Ediciones La Luz, la sección de literatura de la Asociación Hermanos Saíz y el Centro Provincial del Libro y la Literatura en Holguín reafirman su compromiso con el fomento de la poesía joven y la creación literaria en Cuba, ofreciendo una plataforma para que nuevas voces sean escuchadas y reconocidas.
Celebra peña “Colorincantando” el Día de los niños
Como parte de las actividades por el Día de los niños, la peña Colorincantando celebró la fecha por todo lo alto con un repertorio de cuentos y canciones, en el espacio dirigido al público infantil para este verano 2024.
La peña surge a partir de un pedido de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), de hacer un espacio para los pequeños en esta etapa estival. Para ello contactaron a la cantautora Lianet Velázquez para llevarlo a cabo: “Acepté inmediatamente y busqué a mis amigos Alexeis Nuñez, quien me acompaña en la guitarra, y a la actriz Liniana Nuñez”, comenta Lianet.
El nombre de la peña surgió en la búsqueda de un título pegajoso y que estuviera relacionado con los cuentos y las canciones, protagonistas de este espacio, se mezcló la famosa frase “colorín colorado” con la forma “cantando” y surgió Colorincantando.
La cantautora Lianet Velázquez comenta sobre el trabajo con los niños: “Es hermoso y exige una gran preparación. En mi caso escoger un buen repertorio que esté vinculado con canciones que inviten a la participación o las que son simplemente para escuchar, desde lo más conocido hasta lo inédito.
“Creo que el público infantil es muy agradecido, sincero y es un medidor de calidad, en Holguín las actividades infantiles son siempre bienvenidas”, agregó la narradora Liniana Nuñez, quien en esta peña toma el nombre de Lila la viajera, un personaje que recorre diferentes mundos de fantasía, y de cada uno toma nuevas historias para contárselas a los niños.
La peña tuvo su primer encuentro el día 7 de julio y continuará realizándose el segundo y cuarto viernes del mes de agosto en la sede de la AHS de Holguín.
El Día de los niños también contó con la presentación del proyecto infantil Abrakadabra en la Biblioteca Provincial Alex Urquiola, y continuará celebrándose con un concierto de la cantautora Edelis Loyola e invitados, en el Parque Calixto García a las 7 de la tarde.
Un tiempo enorme con el arte
Que Cosme Proenza es un gran pintor porque le gusta a muchísima gente es una hermenéutica muy simple.
Que Proenza es grande porque cuadros suyos adornan el Vaticano y el Teatro alla Scala, de Milán, y engrosan colecciones privadas de todo el mundo, sería un criterio reduccionista.
Para definir su grandeza, su máxima medida, se debe contextualizar, ubicar su sitio en la historia del arte cubano y universal, y esto resultaría una tarea tortuosa sin acudir al misterio de su vocación, la bitácora de su formación, la evidencia de su maestría técnica, los avatares de su “leyenda personal” y el testimonio de su obra cuantiosa.
Afortunadamente, existe el audiovisual Cosme, un enorme juego con el tiempo, de Alejandra Rodríguez Segura, que logró el Premio del jurado joven al mejor largometraje documental, en la edición 17 del Festival Internacional de Cine de Gibara, luego de su estreno a finales de 2022, poco después del fallecimiento del pintor holguinero.
Por Alejandra, amiga entrañable, supimos de primera mano acerca del proyecto; luego, sobre las charlas grabadas en dos tiempos a Cosme, al que le unía una amistad singular; andábamos cerca cuando editaban el documental y celebramos su estreno. También conocimos del material recopilado e imposible de utilizar por su extensión.
Por eso, nos alegró saber que Ediciones La Luz se proponía dejar en letra impresa los humanísimos testimonios del maestro, dichos desde la sinceridad y el afecto elocuentes, al punto de permitirnos participar del ameno diálogo con un artista tan grande como sencillo.
El volumen Un juego enorme con el tiempo, publicado por la editorial de la Asociación Hermanos Saíz en Holguín y presentado durante la reciente Feria del Libro, tuvo su segundo momento durante la última jornada del XXV Premio Celestino, realizada en la ciudad de Gibara. En este espacio amado por Proenza, una pequeña galería atesora una muestra representativa de la presencia femenina en su obra pictórica.
El libro posee un prólogo que no se limita a describir el contenido que le sucede, sino que aporta claves para su comprensión, desde lo histórico y lo metodológico. Como al autor de este prólogo, el periodista y crítico Erian Peña, le asiste la voluntad estética, deviene una suerte de ensayo, colocado a manera de pórtico. Documental, libro y presentación contaron con los buenos auspicios de Ángel San Juan, especialista en la obra de Cosme y su albacea.
Editado prolijamente por Luis Yuseff, con la corrección minuciosa de Mariela Varona y diseñado por Robert Ráez, todos escritores, la obra de Rodríguez Segura posee visualidad atractiva, desde la imagen de cubierta (uno de los autorretratos de Proenza), los colores empleados y la sobria sencillez de la composición y la tipografía elegida, a tono con el formato propuesto.
En la presentación del sábado, en el gibareño hotel Ordoño, el hermoso volumen se acompañó con copias del documental en DVD y separatas contentivas de los versos con que varios poetas holguineros rinden homenaje al gran artista plástico, nacido en Tacajó, Báguanos, en 1948.
Hubo girasoles a montones, luz a raudales y mucho viento bajo el cielo brillante, como un telón azul sobre los techos apizarrados. El resto fue avanzar, andar junto a Cosme por un sendero de imágenes y palabras, tal como se debe leer este libro necesario.
Homenajean artistas cubanos la obra de Reinaldo Arenas
La exposición colectiva «Mi nombre es Celestino» fue inaugurada como parte de la XXV edición del Premio Celestino de Cuento, este lunes, en la galería de la Casa del Joven Creador de la Asociación Hermanos Saíz en Holguín.
Bajo la curaduría de Lorena Velázquez Fraga, la exhibición, compuesta por 27 piezas, tuvo como objetivo celebrar los 25 años de permanencia del certamen y homenajear de forma pictórica a la novela «Celestino antes del alba», de Reinaldo Arenas.
Juan I. Siam Arias, poeta y narrador, en las palabras de presentación, rememoró la manera en que la novela llegó a sus manos y compartió su experiencia como lector: «Encontré frases terribles, de dolor auténtico y del lenguaje más natural. No contaminado», afirmó.
Los artistas cubanos, de diferentes edades y procedencias, lograron a través de técnicas diversas convertir fragmentos de la novela en imágenes, que «esmeradamente figurativas unas, distantes del academicismo otras», han sido el resultado de una profunda introspección en la obra de Arenas y una reinterpretación creativa de su universo literario.
Las interpretaciones plasmadas en las obras de arte dan testimonio de la riqueza y la complejidad de la historia de Celestino, así como de la vigencia y la relevancia de su mensaje en la sociedad actual. Cada pieza es única en su estilo y enfoque, reflejando la diversidad de perspectivas y talento presentes en la escena artística cubana de este tiempo.
Cuando La Luz abre las constelaciones
Lograr que una editorial alcance su definición mejor, con un catálogo de obras y autores que reúne tiempos y perfiles diversos, asentado en trabajos que aúnan elegancia y belleza, resulta labor para distinguir su presencia en los horizontes de la isla y, de manera especial, lo alentador de ver cómo, frente a adversidades circunstanciales o deterioros materiales, el hecho del libro en formato de papel mantiene su carácter, como nave proa del acervo cultural que representa los más altos tesones de la humanidad.
Fundada en 1997 en Holguín, Ediciones La Luz, con la guía del poeta Luis Yuseff, y un equipo que se renueva sin cesar, constituye lo ya citado, para refrendar un quehacer que se expresa muy bien en el logotipo, una palmatoria que ilumina desde el lomo de sus libros, claridad, puntual y comprometida con los valores de la literatura, guía para adentrarse en nombres provenientes de cualquier sitio de la geografía cubana, o de otras regiones bien de América Latina o cualquier parte, siempre a favor de la calidad más acendrada.
Es así como esas ediciones holguineras de la Asociación Hermanos Saíz han logrado convertirse en una de las constancias más altas del libro cubano, y no sólo dentro de las fronteras insulares, sino mucho más allá, lo cual bien permite definirla también como una editorial cubana de honda vocación latinoamericana: el hecho de que significativas figuras de la creación verbal en ese ámbito acepten publicar en ellas, como el novelista chileno Hernán Rivera Letelier o el poeta colombiano Juan Manuel Roca, lo corroboran.
En tal sentido, resulta igualmente halagüeño ver cómo la obra poética del mexicano José Emilio Pacheco (1939-2014), uno de los grandes en América Latina, Premio Cervantes de Literatura en 2009, se ha publicado en La Luz en una cuidadosa antología, En el último día del mundo, preparada por Erian Peña, y por cortesía de los familiares del poeta —vale añadir que la mexicana Elena Poniatowska, también Premio Cervantes, ofreció su consentimiento para incluir como introducción un texto suyo—.
Línea muy relevante de la editorial es la colección que recoge los libros del Premio Celestino de Cuento, certamen anual de alcance nacional, que ya brinda un muestrario que valida lo más granado del género entre los jóvenes; Umbralismo: una antología, de Rafael Ramírez; Los macabeos, de Abel Fernández-Larrea; Nube oscura alrededor de la cabeza, de Julián Marcel; La máquina de recuerdos, de Evelin Queipo; y Boustrophilia, de Roberto Ráez: que para el autor de esta columna demuestran un nivel encomiable.
Igualmente, el hecho de poner en manos de los lectores lo más reciente del quehacer de jóvenes poetas, resulta una experiencia que coloca, a la versada y perseverante editorial holguinera, en el horizonte más diferente por sus empeños y realizaciones; son muchos, pero a la hora de recordar, el oficio de lector me trae ahora mismo dos: Carne roja, de Reynaldo Zaldívar, y Laminarios, de Camilo Noa, títulos que proponen los comienzos de maneras que se afirman en apremios sostenidos con singularidad y aptitud.
Otra colección a tener entre los logros más estimables de La Luz es Analekta, que ya suma 52 con la reciente antología Castas arenas de la noche, de Emilio Ballagas: se trata de cuadernos elegantes y moderados en su volumen, en un listado que aúna voces recientes y otras del acervo ya establecido, para conformar un abanico tan sugestivo como obsequioso: muestras a distinguir, aparte del ya citado, son Quiero escribir con el silencio vivo, de Fina García Marruz, y Una cantidad misteriosa, de Cintio Vitier.
Capítulo ineludible en estas ediciones es el de proyectos muy especiales, como es el ejemplo de dos libros: Un enorme juego con el tiempo, entrevista a Cosme Proenza por Alejandra Rodríguez Segura —acompañado del dvd que contiene el documental de la realizadora—, un viaje a la intimidad creativa de ese gran maestro de la pintura cubana; y Monstruos. Pequeño inventario, de Maikel Rodríguez Calviño, minucioso título que se acerca al imaginario de culturas y tradiciones literarias diversas, bellamente ilustrado.
Un acontecimiento a resaltar en la suma de fortuna que brinda a los aires del libro cubano La Luz, es la publicación de la poesía completa de Delfín Prats, El brillo de la superficie, con prólogo de Ronel González —esmerado ofrecimiento que incluye un cd, con el autor leyendo algunos de sus poemas—, constancia de gratificante iniciativa emprendida por la editorial, para distinguir el legado de una de las voces legendarias de la poesía cubana —de inalterable arraigo en la admiración de los jóvenes poetas—, Premio Nacional de Literatura 2022.
El ejercicio de la traducción literaria, como vía de acercamiento para acceder a otras zonas de la creación verbal ha sido capital en La Luz —vale recordar lo que apuntaba Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura 1990: “Pasión y casualidad pero también trabajo de carpintería, albañilería, relojería, jardinería, electricidad, plomería; en unas palabras: industria verbal. La traducción poética exige el empleo de recursos análogos a los de la creación, sólo que en dirección distinta”—, y con ella, su camino a los lectores resulta loable.
En tal derrotero, títulos como El mar en un cielo, de Saint-John Perse; Compraremos la ciudad; de Allen Ginsberg; e Instrucciones para dibujar un pájaro, de Jacques Prevert —traducidos, respectivamente, para esta ocasión, por Manuel García Verdecia y Ariel López Home, los dos primeros, y el segundo por Irina Chaveco y Elizabeth Soto—, advierten de la jerarquía que para un empeño de tal índole —faena de primer orden en el diálogo permanente entre lenguas y culturas—, resulta primordial para un ensanche editorial.
Y la reciente colección Abrirse las constelaciones, con atracción muy sagaz en su diseño y exactitud en su propósito —nuevos textos de autores que, como propone el nombre, abren zonas del firmamento a la hora de la lectura—, para entregar primicias que se sitúan en trayectos a tener en cuenta: ejemplos como los poemarios Hojarasca de las formas, de Erian Peña; y Rituales de la culpa, de José Luis Laguarda; la novela Al son de la calavera, de Andrés Cabrera; y la pieza teatral Teoría de las flores salvajes, de Katherine Perzant, lo afirman.
Libros en formato de papel —la heredad que atesora El universo en un junco, para decirlo a la manera de la escritora española Irene Vallejo, al recordar lo entrañable de la civilización lectora—, pero también espléndidos audiolibros, carteles, jornadas literarias, eventos con niños y títulos para ellos, promoción sin tregua en las plataformas mediáticas, recuerdan lo propuesto en los versos de Delfín Prats: “…ellos se asomaron mucho más allá /ellos vieron /del otro lado del horizonte…”. Así se confirma cuando La Luz abre las constelaciones.
Romerías de Mayo: evento Memoria Nuestra llega a su fin
Memoria Nuestra, evento central de las Romerías de Mayo, finalizó, este martes, en el Museo Provincial La Periquera con una conferencia magistral y la entrega de los premios correspondientes.
El jurado compuesto por Omar Valiño, José Rojas y Lino Verdecia le concedieron el premio de investigación a Magela Zamora Simons, por su investigación titulada “Ballet Folklórico Babul, arte para salvaguardar las tradiciones”.
Obtuvieron mención los trabajos investigativos: «La cultura del café. Arte e identidad», “Mirar desde la sospecha. La Muestra Joven ICAIC como representación del cine independiente cubano” y “Conciliación laboral familiar. Una estrategia para la superación profesional femenina en museos de Bayamo», realizados por Tania Dranguet Guerrero, Reydi Zamora Rodríguez y Rosalba Pérez Oliva, respectivamente.
El Dr. C José Rojas Bez, investigador, ensayista y profesor del Instituto Superior de Arte inició el encuentro con la conferencia “Cine cubano, clásicos y memoria histórica para una contemporaneidad”.
En la sesión Rojas Bez afirmó: «en los años sesenta nació un cine muy propio. Se convirtió en cine cubano, y latinoamericano. Comenzó no solo con una vocación política y social, sino con una estética. Citó como ejemplo algunas de las películas producidas en aquel momento y los excelentes cineastas con los que se contaba. Hizo un llamado a seguir consumiendo y estudiando estos audiovisuales, para que el cine siga enriqueciéndose.
El encuentro fue propicio para reconocer el trabajo de la Biblioteca Provincial Alex Urquiola, al jurado, al comité organizador y a las instituciones que apoyaron la realización de este evento.
«Memoria Nuestra», otra vez en Romerías de Mayo
El Congreso de Pensamiento y Premio para Jóvenes Investigadores, «Memoria Nuestra» tuvo su primer panel este viernes como parte de la XXXI edición de las Romerías de Mayo.
La sala Revolución del museo provincial La Periquera acogió la conferencia «Compartiendo memorias. A 65 años del Icaic y la Casa de las Américas». Los panelistas invitados fueron Manuel Herrera, director, guionista y Premio Nacional de Cine, y el Dr.C. Jorge Fornet Gil, director del Centro de Investigaciones Literarias de la Casa de las Américas.
Jorge Fornet rememoró la fundación del Icaic y de la Casa de las Américas y cómo fue su proceso de desarrollo hasta llegar a lo que es hoy. Acerca de los premios y las actividades que realiza la Casa, comentó: «Lo que aparentemente fueron proyectos improvisados, tenían tanta solidez que hoy siguen en pie».
Además compartió las experiencias sobre los documentales que el Icaic realizó acerca de la institución. Recordó también la publicación de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, que fue la primera edición de este fuera de Colombia.
Contó sobre el concurso de la Casa de las Américas, llamado originalmente Concurso Literario Hispanoamericano (1960), luego pasó a ser Concurso Literario Latinoamericano en 1964, y finalmente, en 1965, adquirió su actual nombre.
Por su parte, Manuel Herrera expresó: «Entré al Icaic a los 17 años. Había un fervor cultural grande y en ese momento estaba ocurriendo una revolución cultural en Cuba. Existía la intención de cambiar la forma en la que se hacía el cine». Afirmó que el surguimiento del Noticiero Icaic Latinoamericano fue la oportunidad para lanzarse a América Latina.
Sobre la formación académica dijo: «La formación que tuvimos es la que tiene hoy la escuela Internacional de Cine y Televisión».
Insistió en destacar la actitud del Icaic, la Casa y el ballet nacional respecto a la cultura cubana. La relación entre estas instituciones era muy estrecha, «Estábamos integrados», afirmó Manuel.
En su relatoría, al referirse al Quinquenio Gris dijo: «afectó mucho a la cultura cubana y con ello al Icaic». Contó que algunos documentales y películas no podieron proyectarse por no afectar a los involucrados en los trabajos. «Lo más importante era desaparecer el dogmatismo, pero no funcionó, pasado el tiempo seguía la misma política cultural.»
Este diálogo ilustrador durante la primera sesión de Memoria Nuestra, columna vertebral del Festival Mundial de Juventudes Artísticas, brindó a los participantes un espacio para el aprendizaje y sobre todo para el homenaje al Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (Icaic) y a la Casa de las Américas, en sus 65 años.
Desarrollan en Holguín primer concierto pre-Romerías
El concierto Clásicos de Europa tuvo lugar , este jueves, en el Complejo Cultural Teatro Comandante Eddy Suñol de Holguín.
La invitada principal fue la flautista suiza Antipe Da Stella junto a la Orquesta Sinfónica de Holguín, bajo dirección artística y general del Maestro Orestes Saavedra. Edelis Cabreja Loyola acompañó a Da Stella en el escenario.
La sala Raúl Camayd acogió un concierto de lujo donde el público holguinero puedo disfrutar de interpretaciones de canciones como La creación, Inocencia, Libertad, La mañana, La muerte de de Ase y otras tantas.
Este concierto es parte del programa de Herencias Sonoras, que estará sesionando durante el evento. Dentro de este ocurrirá el día 5 otra presentación musical que contará con la participación de Rafael Guedes, compositor; Ariadna Cuellas, guitarrista y Javier Millet director de orquesta.