Amelia Duarte de la Rosa
En el viento… teatro puro
Tomado de Granma
Dentro de tres días la 17 edición del Festival de Teatro de La Habana será historia. Sus nueve jornadas de intensa vida pasarán a formar parte de la memoria colectiva y la historia del importante evento escénico hasta que, dentro de dos años, la edición número 18 retome el llamado del teatro.
Hay teatro, hay festival
Tomado de Granma
El acto escénico siempre ha estado marcado por una realidad que lo pone en desventaja con otras artes: su carácter efímero. Por eso, cuando un festival convoca es una oportunidad insoslayable. Asistir a sus presentaciones es vivir el teatro en estado puro; es encontrar en esos instantes dentro de la sala oscura el personalísimo acto de la creación; un tipo de experiencia vívida que conduce a distintos caminos, al sello de la polémica, del enfrentamiento, de la pasión, de la diversión, del pensamiento, pero jamás de la indiferencia.
Ellas, las de la escena
Tomado de Granma.
Desde la incorporación de la mujer a las tablas, el teatro cubano cuenta en su historia con figuras femeninas sobresalientes. Cualquiera que repase la fibra de la escena nacional ha de acudir, sin duda, a los nombres de grandes actrices que como Luisa Martínez Casado, Rita Montaner, Rosa Fornés, María de los Ángeles Santana, Gina Cabrera, Ernestina Linares, Assenneh Rodríguez, entre otras, componen los rostros y las poéticas de nuestra amplia geografía teatral. Inconfundibles e inolvidables en la memoria, la impronta de muchas de ellas está inscrita en la rica fibra de la escena cubana.